IOTC ha decidido llevar a cabo la reducción de las cuotas de los atuneros europeos en el Océano Índico. El 8 de marzo comenzó una semana crucial de negociaciones en el seno de la Comisión del Atún del Océano Índico (IOTC). La gestión de los stocks de atún amarillo debe ser revisada para reducir las capturas de los países con más de 5.000 toneladas de capturas anuales.
La resolución adoptada para el periodo 2017-2020 ya había establecido cuotas, con el objetivo de reducir un 15% la producción de los atuneros cerqueros europeos. Pero su aplicación no ha estado exenta de dificultades. Con 77.700 toneladas de atún amarillo pescadas al año, de las que casi el 60% fueron capturadas sólo por buques españoles, «se observó un exceso de casi 4.000 toneladas durante el periodo, principalmente a expensas de estos últimos», según fuentes de IOTC.
Si no cumplen sus objetivos, se podría exigir a los armadores europeos una reducción más severa, de hasta el 18%, a iniciativa de la Comisión Europea, que quiere dar ejemplo en este ámbito.
Los interesados defienden un reparto más justo de los esfuerzos. El acuerdo no es equilibrado porque los países cuyos buques pescan entre 2.000 y 5.000 toneladas al año han aumentado considerablemente su presión», afirma Orthongel, que representa a la docena de buques franceses que trabajan en el océano Índico. Hay que revisar el umbral de aplicación de las normas, pero también su control, que queda a discreción de los países costeros. «
Según la organización de productores, a pesar de los compromisos adquiridos en el seno de la CAOI, algunos países, como Irán y Sri Lanka, se muestran demasiado negligentes y utilizan, por ejemplo, artes prohibidas que pueden frenar gravemente la recuperación de las poblaciones de atún amarillo, como las redes de deriva de más de 2.500 metros de longitud.
