La flota del Cantábrico reanuda hoy la costera de la anchoa después de haber paralizado las faenas por los bajos precios que estaba obteniendo el bocarte en lonja. Medio centenar de barcos gallegos toma parte en esta campaña.
La actual temporada está siendo «regular» en comparación con la del año pasado, pero las piezas que se están capturando continúan siendo de pequeño calibre. Los bajos precios están pasando una mala pasada a los pescadores que han tenido que cumplir protocolos de seguridad para evitar contagios del COVID-19 sin obtener premio a su esfuerzo.
El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, apuntó que la costera «no está siendo buena», según recogió Europa Press. Y no solo por el precio, también por el tamaño, que no es el más adecuado ni el más demandado por la industria.
Blanco señaló que, hasta el momento se han logrado capturar unas 7.000 toneladas de las 25.000 que están autorizadas a pescar en el primer semestre del año.
No es la primera vez en esta temporada que se interrumpe la costera. Ya en marzo, las organizaciones de productores decidieron bajar bandera y paralizar la campaña por el estado de alarma y las bajas cotizaciones.
