– La Comisión Interfederativa de Cofradías de Pescadores de la Comunidad Valenciana ha recordado la importancia de consumir las especies de proximidad capturadas ante la costa Mediterránea con un sello de calidad y seguridad alimentaria inigualable.
Un año más este organismo que representa los intereses de todas las cofradías profesionales de pescadores del territorio ha recordado por medio de esta campaña la importancia que tiene no solo para el sector sino también para el futuro del planeta, la descarbonización y el cambio climático el consumo de pescado de proximidad, de kilómetro cero y capturado a pocas millas de la costa. Para COINCOPESCA el pescado subastado en las lonjas de la Comunidad Valenciana es una garantía de calidad para el consumidor y sobre todo un producto que ha sido capturado bajo las estrictas medidas de seguridad sanitarias que exige la Unión Europea. Por ahora el pescado que se desembarca en los muelles valencianos por parte de la flota de arrastre, de cerco y de artes menores es de los más controlados del mundo y por tanto para COINCOPESCA se trata de un producto con un sello de calidad inigualable.
Los valencianos consumen pescado de lonja tres veces en la semana
La campaña «Peix de Llotja 2021» ha realizado una encuesta a 306 personas de la Comunidad Valenciana para conocer la regularidad en el consumo de este producto de proximidad y el gasto mensual. El resultado ha sido que casi el 100% de los encuestados consume pescado de lonja tres veces a la semana y gasta una media de 25 € al mes en este producto de proximidad. Otro de los datos positivos que se han obtenido ha sido que más del 60% de los encuestados conocían la campaña Peix de Llotja, el 77,5% son de Castellón, el 67,6% de Valencia y el 65% de Alicante.
Auxilio ante las restricciones que quiere imponer la Unión Europea
El consumo de pescado de lonja es importante para el futuro del sector pesquero de la Comunidad Valenciana, del mismo modo que lo es consumir cítricos, zapatos o azulejos valencianos. Pero el futuro del sector en estos momentos es muy negro a consecuencia de las graves restricciones que quiere imponer la Unión Europea a la flota de arrastre de la Comunidad Valenciana dedicada a la pesca de demersales. Si finalmente Bruselas aplica su política de reducciones drásticas en los días de pesca al sector del arrastre, se perderán miles de puestos de trabajo, se desguazarán centenares de barcos de arrastre y artes menores, se cerrarán cofradías de pescadores y la sociedad perderá parte de su cultura mediterránea. Por lo tanto, la campaña Peix de Llotja también ha servido para concienciar a la sociedad de la importancia del sector en un futuro inmediato.