Investigadores de la Universidad de Cádiz, pertenecientes a los tres grupos científicos Fisiología y Patología en Acuicultura (RMN-216); Ingeniería y Tecnología de Alimentos (AGR-203) y Microbiología aplicada y genética molecular (BIO-219), participan en el proyecto ‘Phytowelfish’ de Aplicación de nutracéuticos fitogénicos en acuicultura para mejorar el bienestar animal y la calidad de la carne, en el marco del Plan Complementario de Ciencias Marinas y del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia con la financiación de la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación de la Junta de Andalucía.
Este proyecto, coordinado por los profesores de la Facultad de Ciencias del Mar y Ambientales de la UCA, Ismael Jerez Cepa y Juan Miguel Mancera, y encuadrado dentro de la Línea 2 (Acuicultura sostenible, inteligente y de precisión), tiene como objetivo principal mejorar el bienestar animal y la calidad de la carne de los productos de acuicultura para consumo mediante la aplicación de nutracéuticos fitogénicos (componentes bioactivos de plantas que funcionan como mecanismos de defensa) a través de la alimentación de los peces.
En un contexto de cambio climático global e inestabilidad socioeconómica, “la administración de dietas funcionales con aditivos de origen vegetal es una tendencia clara dentro del sector productivo acuícola, ya que, además de generar productos de valor añadido capaces de aportar beneficios a la salud humana, suponen una herramienta para obtener mayor rendimiento en las instalaciones de cultivo garantizando el bienestar animal y las características nutricionales de los productos”, explican sus promotores.
Dentro de la amplia gama de productos existentes, algunos compuestos “se han demostrado útiles para reducir el estrés, debido a sus propiedades relajantes, o aumentar la frescura y vida útil de los filetes de pescado, debido a sus propiedades antioxidantes. Sin embargo, aún es necesario aumentar el conocimiento específico para determinar los efectos fisiológicos derivados del uso de estos compuestos en las diferentes especies de cultivo, así como validar los protocolos óptimos de inclusión y administración a través de la dieta”.