El descontento de algunos pescadores escoceses no desaparece, seis meses después de la entrada en vigor del Brexit. No perdonan del aumento de las cuotas de caballa en el Atlántico nororiental decidido por Noruega y las Islas Feroe el jueves 27 de mayo, a falta de un acuerdo renovado con el Reino Unido.
Dos organizaciones escocesas, la Asociación de Pescadores Pelágicos de Escocia (SPFA) y la Asociación de Pescadores de las Islas Shetland (SFA), piden a los minoristas y proveedores de marisco que dejen de abastecerse en Noruega y las Islas Feroe.
El Grupo de Defensa de las Especies Pelágicas del Atlántico Norte (Napa) también reaccionó el lunes 8 de junio en un comunicado, en el que se mostraba «alarmado» por la situación: «Las continuas disputas sobre la asignación de cuotas de caballa darán lugar a capturas anuales muy superiores a las recomendadas científicamente. «En una carta dirigida a los estados costeros, Napa pide que se establezcan rápidamente «cuotas sostenibles para todas las poblaciones compartidas en el Atlántico Nordeste».
El acuerdo entre los Estados ribereños había puesto fin precisamente, en 2014, a la «guerra de la caballa» que persistía desde la década de 2010 entre Noruega, la Unión Europea y las Islas Feroe.
