Francia y España van a aplicar medidas más estrictas en el Golfo de León para proteger las valiosas poblaciones de peces y los hábitats en el marco de los esfuerzos de conservación apoyados por la Comisión General de Pesca del Mediterráneo (CGPM) de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
A partir de esta semana, en una zona de 45 kilómetros cuadrados del Golfo de León, se prohíbe toda la pesca de poblaciones demersales (es decir, peces que viven y se alimentan en el lecho marino o cerca de él) realizada de manera que ponga en peligro su sostenibilidad.
En concreto, esto significa que se prohíbe la pesca recreativa y profesional con redes de arrastre y palangres de fondo y media agua. En la zona circundante -de 2017 kilómetros cuadrados- la pesca estará prohibida de noviembre a abril, mientras que durante el resto del año el esfuerzo pesquero (número de buques y días en el mar) no podrá superar los niveles fijados en 2008.
Las nuevas restricciones son el resultado de las recomendaciones de la CGPM acordadas en noviembre de 2021 y se basan en las medidas ya introducidas en 2009, cuando la misma zona del Golfo de León fue declarada Zona de Pesca Restringida (ZRP), que actualmente establece límites a la pesca en cuanto al número de buques que operan en la zona, que no debe superar el número permitido en 2008.
Según las evaluaciones científicas, la zona ofrece un refugio seguro para los desovadores de especies de valor comercial que actualmente son objeto de sobrepesca. La protección de este lugar permitirá la llegada de nuevas generaciones de peces.
«Las nuevas medidas reforzarán nuestros esfuerzos para proteger las zonas de desove de especies de peces como la langosta, la merluza europea y el rape, entre otras, que viven en el Golfo de León. Francia se compromete a hacer todo lo necesario para aumentar los esfuerzos de conservación marina», declaró Eric Banel, director de la Dirección General de Asuntos Marítimos, Pesca y Acuicultura de Francia.
«Hasta la fecha, existen diez zonas restringidas de pesca en la región del Mediterráneo y el Mar Negro, resultado del trabajo de la CGPM. Estas zonas son beneficiosas para los pescadores y el medio ambiente, ya que la biodiversidad marina se recupera y los pescadores se benefician del aumento de las capturas. Nos alegramos de que, con estas nuevas medidas, la zona restringida de pesca en el Golfo de León sea más productiva», ha declarado Pilar Hernández, responsable de pesca de la CGPM y coordinadora del trabajo de la CGPM en el Mediterráneo occidental.
Las nuevas medidas son importantes, ya que el Golfo de León ha sido identificado recientemente como zona prioritaria para la conservación de los recursos y ecosistemas de aguas profundas en el Mediterráneo. Además, aunque el Golfo de León es una de las zonas mediterráneas más productivas y un punto caliente de biodiversidad, está cada vez más amenazado por presiones antropogénicas como la pesca, el turismo y la contaminación, por nombrar sólo algunas.
En todo el Mediterráneo y el Mar Negro, según el informe de la CGPM Estado de las pesquerías en el Mediterráneo y el Mar Negro 2020, la merluza europea se pesca casi cuatro veces por encima de su nivel sostenible y crustáceos como la gamba azul y roja y la cigala se pescan casi tres veces por encima de los niveles que se considerarían biológicamente seguros.
Sin embargo, gracias a medidas de gestión como las restricciones aplicadas en el Golfo de León, estas especies están mostrando signos de recuperación; por ejemplo, las tasas de explotación de la merluza europea han disminuido casi un 30% desde 2018.
El establecimiento de caladeros cerrados o restringidos es el resultado de las negociaciones entre gobiernos, responsables políticos, pescadores y otras partes, y de la creciente aceptación de un enfoque ecosistémico de la gestión pesquera promovido por la CGPM. En la actualidad, 1,8 millones de kilómetros cuadrados de hábitats marinos, es decir, cerca de dos tercios del tamaño de los mares Mediterráneo y Negro (2,96 millones de kilómetros cuadrados) están protegidos por las 10 FRA establecidas por la CGPM