La sesión anual de la Comisión General de Pesca del Mediterráneo (CGPM), celebrada en línea del 2 al 6 de noviembre, aprobó un total de 21 recomendaciones vinculantes y 14 resoluciones para la pesca en el Mediterráneo y el Mar Negro.
Una de las primeras recomendaciones refuerza la prohibición de pescar en el l Golfo de León frente a la Camarga, prohibiendo también las actividades recreativas.
La CGPM se congratuló de la «eficacia» de las restricciones, y también cerró de forma permanente la parte central de la zona de Jabuka frente a Croacia, de 1.500 m2. También se ha acordado una zona de pesca restringida frente a Italia en la zona de Bari y se desea otra en el sur del Adriático.
Reducir las capturas accesorias
La CGPM también quiere reducir las capturas accesorias y combatir la pesca ilegal. Adoptó 12 decisiones para «un marco sólido», que incluye el intercambio de inspectores entre países y el control electrónico a bordo de los buques de menos de 12 metros. Ya se ha elaborado una lista de buques y los buques recalcitrantes deberían ser mejor localizados gracias al cruce de datos globales.
También hay que mejorar la lista de buques autorizados en las zonas de protección. Esta medida es aplaudida por la ONG Oceana, que espera que esta lista sea aún más «completa y transparente».
Además de las medidas de gestión de las poblaciones, sobre todo en el Adriático y el Mar Negro (pequeños pelágicos, rodaballo, esturión, etc.), varias resoluciones se refieren a las redes fantasma, con la obligación de instalaciones de recuperación en los puertos.