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sábado, diciembre 28, 2024
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Las ONGs insisten que las zonas de prohibición de la pesca de arrastre protegerán especies como la gallineta y el sable negro

Gonçalo Carvalho, de Sciaena, explica que significa la prohibición de la pesca de arrastre y de otros tipos de contacto con el fondo en 87 zonas identificadas por la Comisión Europea en los mares de Portugal, España, Francia e Irlanda. Este l coordinador ejecutivo de Sciaena, una ONG que pretende promover la mejora del medio ambiente marino, cree que las nuevas medidas anunciadas en septiembre por Bruselas son «un paso importante» desde el punto de vista medioambiental, pero también para «dar sostenibilidad» a la pesca.

Las 87 zonas ahora delimitadas se basan en el reglamento europeo de pesca de altura aprobado hace seis años. «Además de prohibir la pesca de arrastre por debajo de los 800 metros, este reglamento obliga a proteger los ecosistemas sensibles y ricos en biodiversidad (arrecifes de coral de aguas frías, colonias de esponjas de aguas profundas, montes submarinos, entre otros) de la pesca con artes que entren en contacto con el fondo marino entre 400 y 800 metros», explica un comunicado de Sciaena.

«Uno de los artes de pesca más perjudiciales que contempla la nueva legislación es la pesca de arrastre de fondo, que utiliza redes que capturan numerosas especies, incluidas muchas que no tienen interés comercial para los pescadores», dicen desde esta ONG.

Las zonas ahora delimitadas representan más de 16.000 kilómetros cuadrados de fondos marinos en los mares de Portugal, España, Francia e Irlanda. En comparación con el total de las aguas de la UE por encima de los 800 metros de profundidad, siguen representando sólo el 2%.

Zonas de incubación
«Se trata de un área relativamente pequeña, teniendo en cuenta el resto del mar que está disponible para la pesca», especificó Gonçalo Carvalho, contactado por Wilder, destacando que se delimitaron «algunas áreas que bien protegidas servirán como zonas de maternidad, donde las especies pueden crecer.»

El coordinador de Sciena puso el ejemplo de las zonas del norte de Irlanda, que «son muy importantes para el sable negro, que se reproduce allí y luego migra al sur, donde se pesca». Además del sable negro, las nuevas medidas también podrían ayudar al crecimiento de otras especies comercialmente importantes para los pescadores: el besugo negro, la gallineta, el besugo, la brótola, el rape, la cigala y la gamba roja, dijo.


Por otro lado, estas zonas albergarán especies que son víctimas accesorias de este tipo de pesca, como varios tiburones de aguas profundas, peces linterna, varios pulpos y calamares. Y también corales y esponjas «que tardaron cientos de años en desarrollarse» y que «son muy importantes en el ciclo del carbono».»


«Si no se hace nada, corremos el riesgo de agotar los ‘stocks’ de peces de aguas profundas en unas decenas de años», advierte el activista, que subraya la urgencia de que Portugal invierta más en el conocimiento de los fondos marinos y de las especies que los habitan.

Portugal con menos zonas

Gonçalo Carvalho también explicó que por ahora es difícil saber con exactitud la superficie de cada país, pero que el caso portugués es el que tiene menos zonas incluidas en estos 87.

Analizando un mapa elaborado a partir de las coordenadas publicadas por Bruselas, se puede ver que la mayoría de las zonas protegidas de nueva creación en aguas nacionales se encuentran al sur del Algarve. Y que también está cubierto el Banco Gorringe, que está a 120 millas náuticas (unos 220 kilómetros) de la costa, al oeste-suroeste del Cabo San Vicente. Esta zona, de 200 kilómetros de largo y 80 de ancho, fue clasificada en 2015 como la primera área marina protegida de Portugal. «Es un paso importante que llevábamos esperando seis años», señala el mismo funcionario, que añade que las zonas delimitadas por la Comisión Europea pueden revisarse cada añ

¿Cómo se definieron las 87 zonas?

La ONG afirma que «la delimitación resultó del cruce de dos tipos de datos. En primer lugar, los científicos del CIEM -Consejo Internacional para la Exploración del Mar-, organización intergubernamental dedicada al conocimiento científico de los ecosistemas marinos, identificaron las zonas con alta probabilidad de albergar ecosistemas vulnerables».

También señalan que «esta información se cotejó con los lugares en los que se había practicado la pesca en los últimos años, que quedaron fuera de las nuevas medidas, entre otras cosas porque si hay ecosistemas vulnerables en esos lugares ya estarán muy afectados. La propuesta final fue aprobada por un comité de expertos de 27 Estados miembros, en una votación en la que Portugal se abstuvo».

Gonçalo Carvalho reconoce que como respuesta ha habido «muchas protestas por parte de la flota de arrastre», pero «la atención se centra en la importancia de estos lugares para hacer una pesca más sostenible». Y señala que «hay varias zonas que los propios pescadores, en los últimos años, se han dado cuenta de que es importante proteger».

De hecho, las asociaciones pesqueras vinculadas a las regiones ultraperiféricas europeas, entre las que se encuentran las Azores, Madeira y las Islas Canarias, han solicitado al CIEM que estudie e identifique los ecosistemas marinos vulnerables también en sus aguas. «En estos archipiélagos, esta pesca es de gran relevancia», dice.

Prohibición más eficaz que en las zonas marinas protegidas
Una de las consecuencias de la nueva legislación es que habrá una «prohibición efectiva de la pesca más destructiva», incluso en las partes donde ya había zonas marinas protegidas. Esto se debe a que en muchas de estas zonas se siguen permitiendo diversos tipos de pesca, incluida la de arrastre.

¿Y qué hay de la aplicación de la ley? «Somos relativamente optimistas», responde el coordinador ejecutivo de Sciaena, que cree que las medidas en este campo son «relativamente sencillas».

El hecho es que las zonas en cuestión están ya a unos 20 o 30 kilómetros de la costa portuguesa, lo que significa que los barcos que llegan allí son pocos y están obligados a utilizar la señalización por satélite. «No será difícil de controlar. Y la presencia de un barco se notará.

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