El sector naval español ha incrementado en tres años un 45% las contrataciones con respecto a los niveles prepandemia, duplicando asimismo los contratos registrados en 2020, según datos del informe de actividad del sector naval de 2022 de Pymar, sociedad que agrupa los principales astilleros privados españoles.
En 2022, el sector registró un aumento del 56% en contrataciones y un 24% más de CGT (arqueo bruto compensado), posibilitando que el número de buques en construcción creciese interanualmente un 24% con un total de 56 buques y 305.513 CGT.
Este incremento de la actividad también se vio reflejado en los astilleros de reparación, mantenimiento y transformación naval, donde la facturación se situó un 35% por encima de la media de los cinco años anteriores.
Con estos datos, la patronal sel sector naval destacó que España se mantiene en 2022 como segunda potencia en contratación a nivel europeo y novena a nivel mundial.
En concreto, el posicionamiento español destaca en aquellas tipologías de mayor complejidad constructiva y valor añadido, como los grandes buques pesqueros -donde fue líder mundial en contratación-, o los buques oceanográficos -donde se sitúa como segunda potencia mundial con mayor volumen contratado-.
APUESTA POR LA ACTIVIDAD DE LA RENOVABLES MARINAS.
Asimismo, la industria naval apuesta por la diversificación de su actividad hacia las energías renovables marinas, con el fin de aprovechar las oportunidades derivadas del desarrollo de la eólica flotante en España. De esta manera, en 2022, el 21% de la cartera de pedidos nacional estaba integrada por buques de apoyo a campos eólicos marinos, situando a España segunda en la clasificación mundial, únicamente por detrás de China.
La consejera delegada de Pymar, Almudena López del Pozo, consideró que «para afrontar el futuro y consolidar estos magníficos resultados, fruto del esfuerzo de los astilleros», el sector debe «continuar avanzando en el proceso de transformación de la industria naval, ganando competitividad y apostando por la sostenibilidad».
En un proceso de cambio
A este respecto, la industria naval se encuentra actualmente inmersa en un proceso de cambio que se extiende hacia aspectos claves como su sostenibilidad medioambiental, con el reto de conseguir el buque neutro en carbono, impulsando así la apuesta por promover la I+D+i en esta materia.
Así, el 34% de las unidades de la cartera nacional contaban con capacidades para, en un futuro próximo, poder utilizar combustibles alternativos y tecnologías de menor huella ambiental, un porcentaje 10 puntos por encima del registrado en la media global.
Además, mientras que en la cartera mundial la opción principal continuó siendo el gas licuado, España ha seguido implementando soluciones alternativas como el hidrógeno verde o los compuestos hidrogenados, con el fin de alcanzar el objetivo de cero emisiones.