Una investigación de la Universidad de St Andrews ha arrojado nueva luz sobre la interacción entre la pesca con redes fijas en el Reino Unido y los mamíferos marinos, identificando factores clave que influyen en las capturas incidentales de estas especies. El trabajo, publicado en el ICES Journal of Marine Science, se apoya en un extenso conjunto de datos recopilados entre 1996 y 2023 dentro del Programa Británico de Monitoreo de Capturas Incidentales (Bycatch Monitoring Programme, BMP).
El estudio ha analizado registros de casi tres décadas, lo que lo convierte en una de las evaluaciones más exhaustivas realizadas hasta ahora sobre el impacto de las redes fijas en cetáceos, marsopas y focas en aguas británicas. Este volumen de información ha permitido detectar patrones de ocurrencia y establecer correlaciones entre las tasas de capturas accesorias y diversos factores ambientales y operativos.
Factores de riesgo identificados
Los investigadores señalan que las capturas incidentales no son uniformes, sino que dependen de variables como la ubicación geográfica de la pesquería, la estacionalidad, el tipo de red fija y la intensidad del esfuerzo pesquero. Algunas zonas y épocas del año presentan mayor vulnerabilidad para ciertas especies de mamíferos marinos, lo que, según los autores, refuerza la necesidad de aplicar medidas de gestión espacial y temporal más específicas.
La investigación enfatiza que, aunque la Directiva Hábitats de la UE y los compromisos internacionales obligan a minimizar las capturas accidentales de mamíferos marinos, los avances dependen de la integración de la ciencia en la gestión pesquera. Los autores subrayan que disponer de datos tan detallados abre la puerta a políticas más efectivas, desde ajustes en las artes de pesca hasta cierres temporales en áreas sensibles.
Un reto pendiente
Las capturas incidentales representan una de las principales amenazas para especies como la marsopa común, catalogada como vulnerable en algunas áreas del Atlántico nororiental. El estudio concluye que es imprescindible mantener y reforzar los programas de monitoreo, al tiempo que se fomenta la innovación en técnicas de pesca más selectivas que reduzcan al mínimo la mortalidad de fauna marina protegida.
