La asociación Arvi considera que el reglamento de trasbordos producirá un desabesticimiento de pescado por la imposibilidad de entrada de grandes volumenes de pescado.En poco más de un mes, el próximo 1 de Julio, entrará en vigor el Reglamento 2017/1973, una normativa comunitaria que obliga a que todas las capturas pesqueras de las flotas de la Unión Europea que sean transbordadas en un país tercero dispongan de un certificado sanitario expedido por ese estado para poder desembarcar su carga en la Unión. Es decir, que trata como si fueran importaciones las capturas de buques de pabellón europeo y, por ende, español.
El sector pesquero representado por ARVI, la mayor asociación pesquera de España y Europa, quiere alertar del riesgo de desabastecimiento de pescado que puede generar la aplicación de esta normativa que ralentizará los trámites portuarios internacionales y nacionales, e incluso puede bloquear la llegada de los buques y su carga a la UE, ya que se ignora si los terceros países afectados acatarán las directrices dadas por Bruselas de que tendrán que facilitar esa documentación a los barcos de pabellón europeo para que sigan navegando con destino a sus países de origen. Igualmente se desconoce qué agencias se encargarán de expedir dichos certificados sanitarios en los países en los que realizan los transbordos de una carga estimada de unas 100.000 toneladas de pesca como mínimo.
Afectan a la flota exterior
La aplicación de este reglamento afectará a buena parte de la flota exterior española, principalmente a los buques arrastreros y palangreros congeladores que faenan por el Atlántico, el Pacífico o el Índico.
Para José Antonio Suárez-Llanos, director gerente de ARVI, “se trata de un problema grave que puede provocar un estado de bloqueo de las cargas y degenerar en un desabastecimiento a los mercados españoles y europeos de más de 100.000 toneladas de pesca, ya que no hay constancia de que los terceros países vayan a tener en cuenta el Reglamento de la Comisión (CE) 2017/1973. Y es imposible, además, asegurar que los servicios veterinarios de esos países terceros vayan a dar el visto bueno o la documentación requerida, tal y como exige Bruselas”.
Arvi, la cooperativa de Armadores de Pesca de Vigo, no ha recibido respuesta aún de que los terceros países van a facilitar esa documentación. Tampoco se sabe qué agencias se encargarán de expedir estas informaciones en los países en los que realizan los transbordos.
El sector pesquero se reúne el 30 de mayo con el Ministerio de Sanidad, poco más de un mes antes de que el reglamento entre en vigor el 1 de julio, un periodo insuficiente para que quede correctamente implementado en los terceros países. El reglamento complica aún más la situación por las estrictas penalizaciones que conlleva su incumplimiento.
