La UE apoya proyectos destinados a utilizar algas marinas como ingrediente alternativo para la elaboración de sucedáneos de productos pesqueros motivado por el crecimiento de la conciencia de los consumidores sobre la fragilidad de nuestro ecosistema marino y el impacto que tiene la pesca industrial a nivel mundial. Es precisamente esta toma de conciencia la que está provocando un cambio en los hábitos alimentarios y empujando cada vez más la demanda de alimentos alternativos.
En base a este escenario, nació el proyecto «Seafood Alg-ternative» en el que cooperan las francesas Algama SAS y Seafood Reboot la idea es utilizar algas e ingredientes alternativos para hacer sustitutos de los productos pesqueros.
Utilizando algas, el proyecto ha permitido desarrollar cuatro alternativas al pescado: salmón ahumado, atún enlatado, caviar y crema de tarama.
Ya lanzado hace dos años, en 2021, el proyecto «Seafood Alg-ternative» cuenta con un presupuesto de alrededor de 2,8 millones de euros, de los cuales casi 2 millones puestos a disposición por el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca de la UE.
Por lo tanto, la UE financia de esta manera el desarrollo del sector de las alga consideradas una alternativa nutricional válida; por ser bajos en grasas y ricos en fibra dietética, micronutrientes y compuestos bioactivos, y al mismo tiempo considerados interesantes desde el punto de vista de la sostenibilidad. Cuando crecen en el mar, las algas ayudan a mejorar la salud de los océanos al reducir el dióxido de carbono, el fósforo y el nitrógeno en los ecosistemas marinos.