La Comisión Europea ha presentado su propuesta de oportunidades de pesca en el Mediterráneo y el Mar Negro para 2025, subrayando las prácticas de gestión sostenible y el cumplimiento de los compromisos a largo plazo asumidos en las Declaraciones MedFish4Ever y Sofía.
La UE propone límites de pesca para el Mediterráneo y el Mar Negro enfatizando las prácticas de gestión sostenible y el cumplimiento de los compromisos a largo plazo asumidos con las Declaraciones MedFish4Ever y Sofia. Este paso continúa en la dirección de garantizar la salud de las poblaciones de peces y el equilibrio de los ecosistemas marinos, asegurando la continuidad de industrias pesqueras vitales en estas aguas.
La propuesta incluye una serie de medidas destinadas a promover la explotación sostenible de poblaciones de peces clave, garantizando que las generaciones futuras de pescadores puedan continuar practicando su comercio. En el mar Mediterráneo, la atención se centra en varias especies, incluidas las poblaciones demersales, el dorado, el besugo, el camarón de aguas profundas y la anguila europea. Para estas especies continuarán los planes de gestión plurianuales (PAM) previamente acordados en el marco de la Comisión General de Pesca del Mediterráneo (CGPM), con reducciones graduales de las capturas.
A partir de enero de 2025, el plan de gestión plurianual de las poblaciones demersales del Mediterráneo occidental entrará en su fase permanente. Este cambio concluirá el período de transición de cinco años y marcará el comienzo de medidas de pesca sostenible a largo plazo. Estos incluyen límites al esfuerzo de pesca para arrastreros y palangreros, así como límites de captura específicos para especies como el camarón de aguas profundas. Estos esfuerzos están diseñados para reducir la sobrepesca y proteger la biodiversidad marina, al tiempo que ofrecen mecanismos de compensación económica para fomentar el uso de artes de pesca selectivas.
En el mar Adriático, la propuesta prevé la continuación de la implementación de MAP para especies demersales y pequeños pelágicos, con el objetivo de alcanzar niveles de sostenibilidad para 2026. Para las especies de pequeños pelágicos, como las sardinas y las anchoas, la fase permanente del MAP comenzará en 2025, después de un período de transición de tres años. Esta estrategia se alinea con el objetivo de la CGPM de conservar los recursos a largo plazo y gestionar responsablemente la pesca en la región.
En el Mar Negro, la Comisión propone mantener los límites de captura actuales de espadín, mientras que el total admisible de capturas (TAC) y las cuotas de rodaballo se decidirán en la sesión anual de la CGPM a finales de este año. Estas medidas reflejan un compromiso de equilibrar las oportunidades de pesca con el asesoramiento científico, proteger las especies vulnerables y mantener poblaciones saludables.
La Comisión General de Pesca del Mediterráneo definirá las posibilidades de pesca restantes después de su sesión anual en 2024. Las recomendaciones del Comité Científico, Técnico y Económico de Pesca (CCTEP), previstas para mediados de noviembre, desempeñarán un papel crucial a la hora de orientar la decisiones futuras.
La adopción de estas medidas por el Consejo Europeo en diciembre marcará el camino hacia la pesca sostenible en estas regiones, garantizando que la industria pesquera prospere y al mismo tiempo protegiendo los ecosistemas marinos para las generaciones futuras.