La asociación ORPAGU ha adelantado que la tintorera tendfrá una cuota en el Atlántico norte y otra en el Sur. La espece está en el punto de mira de las asociaciones conservacionistas. Se da la circunsancia que tanto el marrajo como la tintorera, las dos únicas especies objetivo, fueron incluidas en el Apéndice II de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (Cites, por sus siglas en inglés). La falta de datos es otro de los problemas de esta especie, aspecto que genera incertidumbre que al final se traduce en restricciones a la pesca como medida precautoria. Y esto es exactamente lo que ahora puede pasar con la tintorera en el marco de la reunión anual de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (Iccat).
Por un lado, la situación en el Atlántico norte “está bien” y los expertos no han detectado “sobrepesca ni índices de que esté sobrepescado”. Por ello, desde la flota esperaban que no se plantee ninguna alteración en el total admisible de capturas (TAC) ni medidas restrictivas, pese a la presión que saben que llegará por parte de algunas ONG.
Otra situación se da en la zona sur del océano. Tras la reunión en Bruselas, desde el sector destacan que “hay algo más de incertidumbre”: si bien “no hay sobrepesca”, si se ha detectado “indicios” de que puede estar sobrepescado. “Por lo que es probable que se plantee alguna propuesta, ya que ahora ni siquiera hay un TAC”, explican.
En este sentido, la decisión del Cites del pasado año de incluir la tintorera como especie a controlar comercialmente fue un duro traspiés para la flota palangrera, ya que este organismo y la Iccat “deben ser coherentes en sus planteamientos”.
La reunión ICCAT finaliza 20 de noviembre en la ciudad de El Cairo, Egipto y se confirmará la situación del pez espada, así como de otras como el atún.