europa-azul.es
jueves, diciembre 18, 2025
Inicionoticias de pescaLa Eurocámara reclama planes de renovación y cambios legales para descarbonizar la...

La Eurocámara reclama planes de renovación y cambios legales para descarbonizar la flota europea

El Parlamento Europeo ha dado un paso más en el debate sobre la transición energética de la pesca comunitaria al respaldar un informe que reclama planes de renovación de buques, más financiación y ajustes legislativos para acelerar la descarbonización de la flota sin dejar atrás a los segmentos más frágiles del sector. La iniciativa sitúa el objetivo de neutralidad climática en 2050 como horizonte ineludible y advierte de que el esfuerzo exigirá una “transición justa”, combinando modernización, innovación tecnológica y mejoras en las artes de pesca.

El documento parte de un diagnóstico conocido pero cada vez más apremiante: la descarbonización se está convirtiendo en un reto estructural para la pesca, especialmente para las pequeñas empresas y la flota artesanal, con menor músculo financiero para abordar inversiones y con márgenes muy estrechos ante el encarecimiento de la energía. En este marco, la Eurocámara defiende que la transición no puede limitarse a objetivos generales, sino que debe traducirse en instrumentos concretos y en un marco normativo que no bloquee la inversión.

Renovación, auditorías energéticas y más instrumentos financieros

Entre las principales propuestas, el Parlamento apuesta por esquemas de renovación de buques impulsados por la Comisión Europea y los Estados miembros, en cooperación con actores privados, como vía para dinamizar la modernización de una flota cuya edad media ronda las tres décadas. A la vez, reclama revisar la Política Pesquera Común (PPC) y el Fondo Europeo Marítimo, de Pesca y de Acuicultura (FEMPA/EMFAF), al considerar que las normas actuales restringen severamente la financiación pública y privada destinada a ese salto tecnológico.

El informe plantea, además, que la Comisión explore instrumentos de financiación adicionales al FEMPA para sostener la transición energética del sector, y sitúa las auditorías energéticas de los buques como una herramienta clave para identificar mejoras de eficiencia, proponiendo que puedan desplegarse con apoyo del propio fondo comunitario. En paralelo, se menciona el potencial de tecnologías como la inteligencia artificial para optimizar rutas de pesca y consumo energético, junto a la necesidad de un calendario de descarbonización por fases, apoyado en el mejor conocimiento científico y los datos disponibles.

Artes más selectivas y puertos preparados para la transición

La Eurocámara vincula la descarbonización no solo al motor o al combustible, sino también a la innovación en artes y técnicas de pesca, con un mensaje nítido: la eficiencia energética debe ir de la mano de mayor selectividad y menor impacto sobre hábitats marinos. El informe pide a la Comisión inversiones orientadas a mejorar la selectividad de los aparejos, reducir capturas no deseadas y prevenir la captura de juveniles, al tiempo que reclama avances en infraestructura portuaria y en la actualización de los buques para garantizar seguridad y condiciones laborales adecuadas a bordo.

El ponente del informe, el eurodiputado Ton Diepeveen, defendió que la propuesta busca un enfoque práctico: reducir barreras a la inversión, estimular la innovación y reforzar la certidumbre para el sector, con la vista puesta también en el relevo generacional.

Contexto: emisiones bajas, dependencia de importaciones y cambio climático

El debate llega en un momento en que Bruselas insiste en el objetivo climático de 2050, mientras el propio sector afronta impactos crecientes del cambio climático, desde episodios de meteorología adversa hasta migraciones de stocks por el calentamiento del mar. El informe recuerda además una paradoja estratégica: aunque la flota europea ha reducido emisiones y su peso en el total mundial es muy bajo, la UE importa más del 70% del marisco y pescado que consume, lo que reabre el debate sobre autonomía alimentaria y resiliencia de la producción propia.

A partir de ahora, el foco se desplaza a la Comisión y a los Estados miembros: convertir el mensaje político del Parlamento en cambios normativos, reglas de financiación y programas capaces de aterrizar la transición energética en los muelles, especialmente allí donde la modernización es más costosa y la rentabilidad, más vulnerable.

Artículos relacionados

Lo más popular