Un nuevo estudio publicado en Nature Ecology & Evolution destaca la importancia de integrar la equidad en el diseño de las intervenciones para hacer frente a la crisis de la biodiversidad y el cambio climático.
Los investigadores señalan que sin un trato justo para todos se corre el riesgo de emprender acciones perjudiciales que pueden comprometer la salud y el bienestar humanos, aumentando la vulnerabilidad de las poblaciones marginadas. Esto podría obstaculizar la consecución de los objetivos comunes en materia de clima, conservación y desarrollo sostenible.
Para hacer realidad las ambiciones mundiales de desarrollo sostenible, cambio climático y biodiversidad en los espacios oceánicos, es crucial que nadie se quede atrás. Anteponer la equidad es un paso necesario para garantizar el bienestar de todas las personas que utilizan y acceden a los océanos, salvaguardando al mismo tiempo el planeta.
Necesidad de un cambio transformador
El estudio reclama un cambio transformador hacia la sostenibilidad de los océanos, que sólo puede producirse implicando a las partes interesadas en formas más inclusivas y equitativas de desarrollo sostenible, adaptación al cambio climático y conservación. Entre los puntos clave propuestos figuran.
- Participación inclusiva: garantizar la participación de todos los grupos interesados en la gobernanza de los océanos, incluidos los procesos de ordenación del espacio marino. Esto significa invitar a representantes de pueblos indígenas y organizaciones de pesca artesanal a las reuniones de planificación y elaboración de políticas para abordar sus preocupaciones.
- Toma de decisiones equilibrada: los grandes actores, como gobiernos, ONG y empresas, deben centrarse en la equidad en sus procesos internos de toma de decisiones, evaluando si sus acciones son realmente integradoras y justas para todas las partes interesadas.
- Normas reformadas y sistemas arraigados: transformar las normas y los sistemas existentes para hacer frente a las injusticias de larga data en las zonas costeras y los océanos, y ofrecer reparación cuando las acciones del pasado hayan perjudicado considerablemente a las comunidades costeras.
Implicación de las comunidades locales
Cientos de millones de personas de todo el mundo viven cerca del océano y dependen de él para su subsistencia. Por tanto, es esencial que sus voces y necesidades se tengan en cuenta en las decisiones que afectarán a sus vidas, incluido el desarrollo de la economía azul, la creación de zonas marinas protegidas y la aplicación de medidas climáticas.
Para hacer frente con eficacia a la crisis del clima y la biodiversidad, la equidad debe estar en el centro de la gobernanza de los océanos. Implicar a todas las partes interesadas y garantizar que las decisiones sean integradoras y equitativas es clave para promover un desarrollo sostenible que beneficie a todas las comunidades costeras y marinas. Mediante estos esfuerzos conjuntos, el mundo puede avanzar hacia un futuro en el que los océanos se gestionen de forma sostenible, garantizando el bienestar humano y la salud del planeta.