La flota del Cantábrico ha capturado ya cerca del 32,77 % de la cuota del Bonito del Norte (Thunnus alalunga) en la campaña actual, que asciende a unas 25 000 toneladas . El pescado llegó antes de lo habitual —a mediados de junio—, lo que ha permitido intensificar las capturas tanto en tamaño como en volumen.
La costera del Bonito del Norte 2025 ha arrancado con fuerza con unas primeras capturas desde mediados de junio, un ritmo sostenido y parte de la completada en apenas un mes. El mercado responde con buenos precios, lo que da confianza al sector. Ahora queda por ver si esta tendencia se mantiene hasta el final de la campaña y las capturas se sostienen en niveles rentables.
La captura del 32 % de la cuota se traduce en 8.520 toneladas ya extraídas, lo que supera significativamente las cifras del año pasado en el mismo periodo. Todavía quedan disponibles cerca de 17.480 toneladas.
El presidente de la Federación de Cofradías de Pescadores de Cantabria, César Nates, señaló que este ritmo elevado es una “campaña productiva” y confía en que se mantendrá dicho desempeño. El bonito grande se vende en lonja cerca de 4 €/kg, mientras los ejemplares pequeños rondan los 3,50 €/kg .
El buen precio se atribuye a dos factores: calidad del pescado, y demanda estable, especialmente por las conserveras y el mercado fresco .
Aunque en 2024 la campaña acabó con solo un 51,5 % de cuota consumida, el impulso de esta temporada —gracias a una cuota mayor y la entrada anticipada del pescado— ha invertido esa tendencia inicial baja .
En otras campañas recientes, la cuota no se agotaba antes de agosto, incluso cuando las capturas eran menores; ahora el ritmo es más alto y más dinámico. Aquella “notable” disminución de las capturas hizo que el precio medio en las lonjas fuera de 4,13 euros kilo, El pasado año, la costera que se inició a mediados de mayo y se prolongó hasta finales de octubre. El único momento álgido en cuanto a capturas fue entre el 10 y el 22 de julio. A partir de esa fecha el pescado se fue dispersando y alejando. Esto provocó que algunos barcos se fueran hasta Irlanda persiguiendo a la especie, pero sin conseguir grandes resultados. Otra parte de la flota se dirigió a Galicia con capturas muy escasas.Por su parte, la flota de cacea, con líneas de anzuelos, acabó la costera muy al norte, más cerca de las aguas de Irlanda que de las vascas
