Los barcos vascos, gallegos y cántabros han dado por finalizadas las campañas de este año con capturas de sardina y anchoa. Las embarcaciones de cerco habían realizado importantes capturas de sardina, en la costa de Francia, especialmente, en la zona VIIIb. Estos barcos han capturado una media de 15.000 a 20.000 kilos por barco a unos precios que han oscilado entre 0,70 euros-kilo y 0,40 euros-kilo. «Tras reducirse el precio por la aparición de sardina pequeña hemos decidido finalizar las faenas. Los barcos gallegos han decidido regresara a sus puertos», declaró Norberto Emazabel, presidente de la Organización de Productores de Guipuzkoa.. A lo largo de tres semanas se había produciendo la descarga de sardina que había supuesto un balón de oxígeno, tras una costera de bonito floja por haber capturado un 53 por ciento de la cuota de esta especie.
Los barcos que habían finalizado la costera de bonito se habían incorporado a los habituales de Galicia y Cantabria que capturan sus especies pelágicas en el Cantábrico. La sardina capturada se destina para carnada de otras especies, para congelación y para comida de la acuicultura.
Para los barcos que finalizaron el bonito estas pescas han sido un importante alivio debido a que no pudieron agotar la cuota al marcharse la especie al Norte y Galicia. Ahora con la sardina han podido sacar rentabilidad a una especie que estaba a tres horas de puerto.