En el marco de una operación contra la pesca furtiva y la distribución ilegal de productos pesqueros, la Guardia Civil ha interceptado un atún rojo de 180 kilogramos que fue pescado de forma ilegal. Al no tener ningún tipo de documentación que determinara su procedencia, no han podido comprobar que sea un alimento apto para el consumo humano.
Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Compañía de la Guardia Civil de Marbella (Málaga), con la colaboración de Inspección Pesquera de la Junta, ha llevado a cabo una actuación contra la pesca furtiva y la distribución ilegal de productos pesqueros, cuando se procedió a intervenir un atún rojo pescado ilegalmente que iba a ser comercializado en un mercado de la localidad marbellí.
En concreto, el pasado día 17 de marzo los agentes observaron cómo tres personas estaban transportando un atún rojo de 180 kilogramos de peso desde un vehículo hasta un mercado de Marbella donde iba a ser comercializado. Tras la inspección del ejemplar, corroboraron que el mismo había sido capturado ilegalmente, careciendo de cualquier tipo de documentación y etiquetado que acreditara su legal procedencia, según han informado desde la Guardia Civil a través de un comunicado.