Bruselas endurece las normas de trazabilidad para frenar la pesca ilegal, lo que complicará los envíos británicos al mercado europeo
Las exportaciones pesqueras del Reino Unido enfrentan un nuevo desafío desde el 10 de enero de 2026: la entrada en vigor de las reglas renovadas del reglamento IUU de la Unión Europea (Regulación contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada). Entre los cambios, destaca la obligatoriedad del uso de certificados de captura 100 % verificados digitalmente mediante el sistema electrónico CATCH, incluso para productos británicos que antes gozaban de certificaciones manuales.
¿Qué implica este ajuste?
- Trazabilidad estricta
Hasta ahora, algunos cargamentos podían pasar con certificados en papel validados por autoridades británicas. Pero la nueva reglamentación exige registro completo en CATCH, que vincula descendencia (naves, especies, fechas de captura) con validaciones electrónicas oficiales . - Mayor control en puntos fronterizos
Los controles se intensificarán en los principales puertos de entrada en la UE. Cualquier discrepancia entre lo declarado en certificado y lo físico puede bloquear el envío, originar sanciones o incluso la retirada del producto del mercado comunitario . - Respaldo al combate global contra la pesca ilegal
Estas disposiciones se refuerzan para prevenir que productos derivados de pesca IUU, incluyendo aquellos asociados a condiciones laborales abusivas, circulen por los mercados europeos
Impacto sobre exportadores británicos
- Tiempos e incertidumbre: El Reino Unido deja atrás transiciones simplificadas y deberá adaptarse por completo al sistema CATCH. Cualquier retraso en las verificaciones puede causar demoras en Aduanas mientras se cruza hacia mercados como España, Francia u otros estados costeros.
- Aumento de costes: El personal del sector pesquero británico requerirá formación para manejar el sistema digital. Además, fallos informáticos o errores operacionales podrían traducirse en sanciones económicas.
- Competencia desventajosa: Países que ya utilizan CATCH con fluidez (como Islandia o Noruega) contarían ahora con una ventaja en términos de eficiencia, fiabilidad y velocidad en las exportaciones a la UE.
Reacción del sector pesquero británico
La flota del Reino Unido teme que las condiciones vuelvan a ser “un desastre burocrático”, similar al caos posterior al Brexit, cuando perder el acceso sin condiciones al mercado comunitario obligó a enfrentar placas sanitarias estrictas y elevados aranceles .
Mientras tanto, otros actores agrupados en la Marine Management Organisation (MMO) ya han sido llamados por la UE a participar en consultas sobre cómo implementar estos cambios sin bloquear el comercio, especialmente para pequeños barcos que exportan directamente a Europa facebook.com.
Un paso firme hacia la sostenibilidad global
Pese a su impacto logístico, el objetivo detrás de las normas IUU es evitar que productos no transparentes, capturados ilegalmente o con prácticas laborales cuestionables entren al mercado. Este enfoque ha conseguido que la UE prohíba importaciones de países identificados como no cooperantes, como ocurrió con Belice, Camboya y Guinea .
Además, la norma busca alinear la pesca con estándares sociales y medioambientales internacionales, apostando por una cadena alimentaria más ética y sostenible .
- Las nuevas reglas IUU refuerzan los mecanismos de control y trazabilidad mediante el uso obligatorio del sistema electrónico CATCH.
- Los exportadores británicos deberán adaptarse rápidamente o sufrir demoras y sanciones.
- Aunque la medida complejiza la operativa, responde a una lógica global de sostenibilidad y combate contra la pesca IUU.
El reto estará en que Reino Unido implemente estas exigencias operativas antes de enfrentar los nuevos controles comunitarios… con el reloj en cuenta atrás hacia 2026.
