Si bien Europêche respeta la decisión del Tribunal, el sector está profundamente decepcionado de que este fallo detenga operaciones pesqueras gestionadas eficazmente que cumplen con los estándares de sostenibilidad de la UE en esta parte clave de las aguas de África Occidental. Perder el acceso a caladeros tan esenciales es muy preocupante para el sector, especialmente teniendo en cuenta las cada vez más reducidas oportunidades de pesca y los caladeros accesibles a la flota de la UE.
Según Javier Garat, presidente de Europêche: ‘El actual Acuerdo de Pesca UE-Marruecos ha contribuido a mejorar la gestión sostenible de los recursos pesqueros en estos ricos caladeros y fue crucial para la actividad de hasta 128 buques europeos, 700 pescadores y 3.500 trabajadores en tierra. Ahora que el acuerdo está cancelado, se deben contemplar varios escenarios, entre ellos operaciones de pesca bajo autorizaciones directas. En cualquier caso, estamos dispuestos a trabajar urgentemente con todas las partes implicadas para que la cooperación empresarial y pesquera entre Marruecos y la UE pueda continuar en el futuro”.
Cepesca considera que esta sentencia es un nuevo golpe para el sector pesquero español, tanto el andaluz, como el canario y gallego y, especialmente para los pescadores de la provincia de Cádiz, que tradicionalmente han tenido un complemento a su actividad en la posibilidad de ir a Marruecos a capturar especies como boquerón y sardina, en la modalidad de cerco; o besugo, en la modalidad de palangre de fondo. Por su parte, los barcos gallegos pescaban en esas aguas merluza (barcos arrastreros) y palometa (palangreros de fondo).
Según Javier Garat, secretario general de Cepesca y presidente de Europêche, “concretamente, la flota de cerco, que ya se ve sometida a una presión muy importante por parte de la Comisión Europea –que ha propuesto una reducción del 54% del boquerón, y que tienen también unas limitaciones muy grandes para la sardina–, se verá abocada, posiblemente, a amarrar muchos barcos con las consecuencias socioeconómicas que eso va a tener en una población como Barbate”.
Consecuencias para España
El acuerdo de pesca entre la UE y Marruecos, que venció el 17 de julio de 2023, fecha en que los barcos europeos dejaron de faenar en dichas aguas, incluía la posibilidad de obtener licencias a un total de 128 barcos europeos de los cuales 92 eran españoles: 47 de Andalucía, 38 canarios y 7 gallegos, aunque, en el último protocolo, sólo se han utilizado en torno a una veintena por parte de empresas y pescadores de las flotas andaluza, gallega, vasca y canaria. Tras expirar el acuerdo, algunos de los buques afectados se limitaron a pescar en el Golfo de Cádiz (andaluces) y los gallegos en Mauritania.
El vicepresidente de Europêche, Tim Heddema, respondió al fallo afirmando: “Nuestra prioridad sigue siendo el suministro responsable y sostenible de pescado, garantizando que alimentos saludables y asequibles sigan llegando a los mercados globales. El Acuerdo de Asociación de Pesca Sostenible entre la UE y Mauritania será ahora una alternativa aún más importante para la pesca pelágica de la UE, pero sólo si se vuelve comercialmente viable. Por ejemplo, una rápida recuperación de las poblaciones sobreexplotadas por flotas no pertenecientes a la UE será clave para el regreso de más operadores de la UE a aguas mauritanas. Esto requiere una acción adecuada por parte del gobierno mauritano. Es una buena noticia que se den los primeros pasos sobre la base de un nuevo plan de gestión”.
