Maria Luisa Alvarez, directora de FEDEPESCA, organización que representa a 67.200 empresas de comercio especializado en la venta de productos de la pesca y de la acuicultura, experta en distribución comercial, en el sector pesquero y en legislación aplicada al sector, expresa la importancia de las pescaderías tradicionales españolas, “en buena medida garantes de que seamos grandes consumidores de productos pesqueros”. Aunque, por otro lado, ha confirmado el declive que está sufriendo del sector, “que está cayendo severamente, y su retroceso es muy mala noticia para el consumo”.
Alvarez manifiesta que “representamos a las pescaderías tradicionales españolas, de los mercados y de las tiendas de calle, y estamos asistiendo a un declive importante, especialmente por falta de relevo generacional. Hemos perdido ⅓ de las pescaderías desde el año 2007. Había más de 15.000 en ese momento, y ahora estamos en torno a las 9.800. Con lo cual, es un sector que se va haciendo más pequeño, especialmente porque cuesta ya encontrar personas que quieran continuar con estos negocios.
La responsable de Fedepesca destaca el profesionalismo de este sector. “En nuestro caso contamos con grandes profesionales, que son profundos conocedores del producto, con unas habilidades para su preparación y su tratamiento, que son únicas en el mundo. La red de pescaderías tradicionales españolas son en buena medida garante de que seamos grandes consumidores de productos pesqueros, y su retroceso es muy mala noticia para el consumo, que está cayendo severamente, y para la comercialización de una enorme variedad de especies. Tiene un enorme potencial la venta física, porque una pescadería tradicional es un auténtico espectáculo, difícil de disfrutar en otros países y en otros formatos comerciales. Nosotros recomendamos y estamos intentando que, cada vez más, se introduzcan obradores en las tiendas que ofrezcan productos elaborados artesanalmente listos para consumir, con el aval del pescadero o pescadera tradicional; que vendan todos los formatos, tanto en físico como en online; que utilicen whatshap; que utilicen nuestro marketplace ‘La Pescadería Artesanal’; que le den al consumidor todas las opciones, porque hoy tenemos un cliente cada vez más peresozo, que piensa que tiene menos tiempo, pero lo que ha cambiado es la prioridad en el uso de su tiempo. Lo dedica a las redes sociales, a viajar, a estar fuera de casa, y entonces tenemos que ponérselo muy fácil. Y sobre todo también, debe comunicar, estar en las redes sociales. Impartimos mucha formación en marketing digital. Que se acerque más a esos consumidores que no han conocido el formato tradicional de la mano de sus padres, porque no les han llevado a las tiendas”.
La importancia de la salud es máxima.“Se habla mucho de que el consumidor está muy preocupado por la salud, y nosotros como vendedores de productos pesqueros, en la salud es difícil que nos gane nadie. Por eso creo que la gente se dará cuenta del impacto negativo que está teniendo abandonar la dieta mediterránea, en su salud. Las cifras están ahí, aumentan considerablemente las enfermedades crónicas, cada vez en gente más joven; cardiovasculares; la obesidad; el sobrepeso… Creo que necesitamos una política del gobierno que favorezca la alimentación saludable, y eso jugará en nuestro favor. La sostenibilidad económica, medioambiental y social, con los nuevos reglamentos de control, las nuevas herramientas que va a haber de trazabilidad, se va a exigir y a conocer cada vez más los aspectos sociales, de cómo se capturan los peces. Ahora que hay producción de terceros países, entran productos de donde se hace pesca ilegal, o de donde se tienen condiciones de trabajo forzadas. Nosotros pensamos que nuestro formato comercial es el más responsable. Si la gente es cada vez más consciente de lo importante que es llevar a cabo un consumo responsable, nosotros somos la mejor opción”.
