Según el último informe de SEA Europe, en 2024, la actividad de construcción naval ha aumentado, con 1.454 buques (106,4 millones de TPM y 42,1 millones de CGT) contratados hasta agosto, lo que supone un incremento del 31% con respecto a 2023. Las inversiones en nuevas construcciones alcanzaron los 135.400 millones de dólares.
La fuerte demanda está impulsada por la solidez de los mercados y las renovaciones de la flota con buques más sostenibles. Más de la mitad de los nuevos pedidos incorporan combustibles alternativos.
Sin embargo, los elevados precios, los problemas de capacidad de los astilleros y la incertidumbre sobre la tecnología de los nuevos combustibles continúa limitando la demanda.
Los armadores europeos son los mayores inversores, con el 35% del valor de la cartera de pedidos mundial.
Los astilleros europeos poseen el 11% del valor de la cartera de pedidos mundial (47.500 millones de dólares), el 92% de ellos en buques especializados y el 7% en buques offshore. Los cruceros representan el 87% de los contratos europeos en 2024 (en CGT).