Azores, mayo de 2025. La costera de bonito en las Islas Azores ha comenzado oficialmente con la descarga de los primeros 600 kilos por parte del barco Goienkale, abriendo así la campaña de este año para la flota del Cantábrico. Esta primera venta, realizada en subasta, marcó el inicio de una temporada clave para los barcos vascos, gallegos y asturianos que cada año se desplazan hasta estas aguas del Atlántico.
El primer bonito del año alcanzó un precio de 120 euros el kilo, lo que supone una caída del 65% respecto al inicio de la costera en 2024, cuando los primeros lotes llegaron a cotizar a 350 euros el kilo. Este ajuste de precios refleja la estabilización del mercado tras la especulación habitual en las primeras ventas, pero también cierta prudencia ante las perspectivas de la campaña.
Una campaña con 20 barcos del Cantábrico en Azores
La costera de Azores es una de las primeras fases de la campaña del bonito en el Atlántico Norte, donde la flota del Cantábrico se desplaza para aprovechar las concentraciones de esta especie antes de su migración hacia el Golfo de Vizcaya.
Este año, se estima la presencia de unos 20 barcos del Cantábrico operando en aguas de Azores, manteniendo así la tradición y la importancia económica de esta campaña para las cofradías y lonjas del norte de España.
Expectativas para la campaña de 2025
A pesar del descenso en el precio inicial, las previsiones para la campaña son optimistas. Las primeras capturas indican una buena calidad del pescado, y los volúmenes descargados podrían incrementarse en las próximas semanas, conforme avancen las condiciones oceanográficas favorables. Cabe recordar que la costera del pasado año se inició con buenas capturas, pero después en julio y agosto fallaron las capturas. El pescado se alojó de la costa y el tamaño medio de las capturas comenzó a ser menor. De momento, nadie se atreve a realizar un pronóstico de la actual campaña.
El bonito del norte (Thunnus alalunga) es una especie muy apreciada en los mercados españoles, especialmente en conserva, y su campaña constituye un pilar económico para las flotas artesanales del Cantábrico.
“Este primer lote es más simbólico que representativo en cuanto a precios. El mercado se ajustará en cuanto se estabilicen las descargas y la oferta se normalice”, señalan fuentes del sector pesquero.
Una tradición que sigue viva
La campaña de Azores mantiene su importancia estratégica para la flota del Cantábrico, no solo como oportunidad de capturas, sino también como entrenamiento logístico y de coordinación para la posterior campaña en aguas del Cantábrico.
Con este primer desembarque del Goienkale, se da por inaugurada una costera de bonito que, como cada año, genera expectación entre pescadores, comercializadores y consumidores.
