Bruselas quiere limitar la pesca de jurel y merluza, un varapalo entiende la Federación de Cofradías de Pescadores de Asturia que considera «un disparate» sus reducciones «porque habrá barcos que podrían capturar los kilos asignados en quince días», critica el presidente de la Federación. La propuesta de la Comisión Europea (CE) para revisar las cuotas de pesca de 2020 de cara a las tradicionales negociaciones de diciembre ha dejado «temblando» a la flota alarmada por la pretensión de Bruselas de recortar drásticamente las posibilidades de pesca de especies de gran interés para el Principado y el resto de la Cornisa Cantábrica. Y es que la CE plantea una bajada del 20% de la cuota de merluza en aguas ibéricas (de la que depende el sector del palangre costero) y del 19% en el norte, es decir, en el caladero de Gran Sol, donde faena la flota comunitaria. A eso se añade el pretendido recorte de un 41% del cupo de chicharro (jurel) y un tijeretazo del 3% de la cuota de pixín (rape).
Con este panorama, y con un Gobierno previsiblemente en funciones, las tradicionalmente interminables negociaciones para llegar a un acuerdo sobre los totales admisibles de capturas (TAC) se presentan este año más complicadas que nunca. «Todos los recortes que plante la Comisión son malos, pero el de la merluza se lleva la palma. Si semejante disparate prospera habrá barcos asturianos que tendrán que amarrar por falta de especies objetivo», critica Dimas García, presidente de la Federación de Cofradías de Pescadores del Principado. El veterano patrón pone el ejemplo de un barco palangrero de porte medio: «Ahora, esas lanchas están trabajando -malviviendo en realidad- con cupos autorizados de nueve mil kilos anuales. Si le quitan un 20 por ciento, ¿qué va a pescar esa gente? Siete mil kilos de merluza se capturan en quince días… Esto es una vergüenza y cada año vamos a peor».
