Cepesca, cofradías y el CTAG reutilizarán redes para la automoción y la aeronáutica. Dichas entidades han lanzado: “Redes de España”, que busca crear una certificación para la gestión de aparejos que han llegado al final de su vida útil “fomentando su retorno a la economía circular”
La Confederación Española de Pesca (Cepesca) desarrollará e implantará una certificación de rango nacional para gestionar y reciclar aparejos y redes pesqueras a través de procesos innovadores para su retorno a la economía circular. El proyecto Redes de España, avanzado por Cepesca, busca dar cumplimiento al marco europeo sobre los plásticos de un solo uso “a través del establecimiento de un sistema de recogida, transporte y valorización de los aparejos de pesca descartados que garantice a las entidades productoras de los residuos su trazabilidad y reintroducción al mercado”, logrando el objetivo del residuo cero.
El proyecto busca concienciar sobre la problemática de los plásticos de un solo uso, el cuidado de los hábitats marinos y la economía circular “incorporando enfoques de género y de inclusión de colectivos desfavorecidos mediante acciones de comunicación y difusión a la sociedad”. En concreto, dentro del mismo se contemplan estas últimas actuaciones; el desarrollo de la nueva certificación Redes de España, su imagen y reglamento; el diseño de herramientas formativas y acciones de formación sobre la nueva certificación; y el diseño de un sistema de almacenamiento, transporte y valorización de los aparejos.
A fin de desarrollar con éxito esta iniciativa, la entidad que preside Julio Morón coordinará la misma con el apoyo de la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores (FNCP) y el Centro Tecnológico de la Automoción de Galicia (CTAG), todo ello posible gracias a la Convocatoria Pleamar 2023. “Cepesca, consciente del reto ambiental que representan las redes y los aparejos de pesca descartados, ha apostado por la puesta en marcha de una certificación para la gestión de las redes y aparejos de pesca que han llegado al final de su vida útil fomentando su retorno a la economía circular”, expone. Para darle “alcance global” a dicho reto contará con la FNCP, mientras que la colaboración con el CTAG será para encontrar “salidas hacia la circularidad” mediante el diseño de “nuevos materiales” derivados de las redes y los aparejos para sectores como la automoción y la aeronáutica.