El histórico astillero Hijos de J. Barreras, uno de los emblemas de la construcción naval en España, especialmente en cuanto a la flota pesquera y también otras especialidades, como los ferries, desaparecerá en breve como sociedad anónima y su actividad productiva será traspasada a una de las tres empresas que se perfilan como posibles sucesoras: Astilleros Gondán, Astilleros Armón o Marina Meridional, según atlántico.net. Así, el astillero ha presentado la solicitud en el Mercantil con la figura del “prepack”, que facilitará un traspaso rápido de las instalaciones.
Marina Meridional es una sociedad de reciente creación liderada por el empresario José Alberto Barreras, quien ha ofrecido la posibilidad de crear una nueva empresa donde participen las tres, y en la que la suya quedaría en minoría, todo con el objetivo de reflotar y relanzar el astillero bajo sello netamente español.
La liquidación de la sociedad anónima se produce cuando el astillero fundado por una de las ramas de la familia Barreras cumple 130 años. Quien tome el relevo –en este caso, las tres empresas pretendientes son españolas– tendrán la responsabilidad de perfilar el futuro del nuevo astillero y su continuidad, si es que finalmente así se decide.
En los últimos cincuenta años, Barreras ha atravesado por varias crisis importantes. El INI salió en su ayuda cuando quedó malherida tras la construcción de dos plataformas petroleras y años después se privatizó en 750 millones de pesetas en una operación liderada por José García Costas, Albacora y Odiel.
Precedido por una etapa de éxito en la construcción de ferries para Naviera Armas y Balearia, en 2011, recuerda atlántico.net, Barreras suspendió pagos con una deuda de 71 millones de euros, una cuantía muy similar a las cifras de 2020. La liquidación de la sociedad anónima es inminente, aunque este mecanismo no supone el final de la empresa, sino que permitirá separar la unidad productiva, que es la que se vende junto a la concesión y el traspaso de la plantilla.
La llegada de Pemex en 2013 prometía una etapa feliz en la historia del astillero gallego, con muchas promesas de nuevas construcciones, de las que solo se materializó la construcción del flotel “Reforma Pemex”. En 2019 desaparecen los mexicanos y aparece Ritz-Carlton, que se hizo con la totalidad de las acciones. La historia del buque “Evrima” está muy presente. Es uno de los fracasos más sonados de los últimos tiempos en la historia de la construcción naval española y, en concreto, del astillero vigués.