El precio del bacalao ruso y noruego H&G sube 300 dólares por tonelada mientras lotes de Norebo y Murman quedan bloqueados en la UE
El precio del bacalao head and gutted (H&G) de origen ruso y noruego ha experimentado un aumento significativo en los últimos días, alcanzando hasta 300 dólares más por tonelada, según fuentes del mercado internacional. Esta subida responde tanto a factores de oferta y demanda como a crecientes obstáculos logísticos y regulatorios que afectan a las importaciones en la Unión Europea.
En concreto, productos capturados por buques del grupo ruso Norebo y de la compañía Murman estarían actualmente retenidos en almacenes frigoríficos europeos, sin poder ser liberados al mercado, salvo que los compradores hubieran pagado con antelación, indicaron operadores del sector.
Pesca atrapada entre las sanciones y la burocracia
El conflicto geopolítico entre Rusia y Occidente sigue dejando su huella en los mercados de productos del mar. Aunque no se ha confirmado una prohibición directa de las importaciones de pescado procesado de Rusia, las tensiones políticas y las sanciones financieras han generado un clima de incertidumbre que complica las operaciones logísticas y los pagos internacionales.
En este contexto, los distribuidores y mayoristas europeos son más cautelosos a la hora de cerrar acuerdos con compañías rusas. “Si el producto no está ya pagado, es probable que se quede en el almacén sin poder avanzar en la cadena de suministro”, indicó una fuente consultada.
Impacto en los precios globales
Esta situación de “stock en el limbo” ha tenido un impacto directo en la evolución de los precios del bacalao H&G. La menor disponibilidad efectiva en los mercados europeos —tradicionalmente grandes consumidores de bacalao— ha generado presiones al alza en los precios internacionales.
Según los últimos registros comerciales, el bacalao H&G que se cotizaba a niveles de entre 3.800 y 4.200 dólares por tonelada hace unas semanas, ha superado ya los 4.500 dólares por tonelada, y algunos lotes selectos están alcanzando precios incluso mayores.
Norebo y Murman: gigantes atrapados en la burocracia
Norebo, uno de los principales grupos pesqueros de Rusia, y Murman, operador destacado en la región ártica, tienen una importante presencia en el mercado europeo, especialmente en países como Alemania, Países Bajos y España. Sus capturas de bacalao son altamente valoradas tanto por la industria transformadora como por el canal de distribución minorista.
La imposibilidad de mover parte de su stock supone un golpe logístico y financiero que, además, amenaza con alterar la planificación de las campañas pesqueras venideras. Algunas fuentes apuntan que los productores podrían verse obligados a redirigir su mercancía hacia otros mercados como China, Oriente Medio o Latinoamérica.
Consecuencias para el consumidor europeo
El encarecimiento del bacalao H&G y la dificultad de acceso a determinados lotes podrían trasladarse al consumidor final en forma de mayores precios en productos derivados, desde filetes congelados hasta platos preparados en cadenas de alimentación.
Además, si se agrava la situación, no se descartan desabastecimientos puntuales en determinadas categorías de producto, especialmente en países dependientes de las importaciones rusas.
Un mercado en tensión
Mientras la industria observa con cautela, las empresas distribuidoras esperan una respuesta clara por parte de las autoridades comunitarias sobre el tratamiento de los productos pesqueros procedentes de Rusia. La falta de definiciones políticas complica la toma de decisiones en un mercado ya marcado por volatilidad, inflación y cambios en los flujos comerciales globales.
El bacalao, símbolo del Atlántico Norte y del comercio pesquero internacional, vuelve a estar en el centro de un tablero donde confluyen política, economía y sostenibilidad.
