europa-azul.es
viernes, febrero 28, 2025
Inicionoticias de pescaComercializaciónEstados Unidos baraja aranceles para los productos agroalimentarios y pesqueros

Estados Unidos baraja aranceles para los productos agroalimentarios y pesqueros

La administración Trump está evaluando introducir un nuevo impuesto del 25% sobre los productos agroalimentarios de la Unión Europea, y el sector europeo es uno de los que corre el riesgo de sufrir las contracciones más significativas. Según un análisis de RaboResearch, elaborado por Barend Bekamp y Hosang Wu, las repercusiones de esta política proteccionista podrían tener un impacto significativo en los agricultores y productores del compartimento, reduciendo la competitividad de los productos del mar europeos en Estados Unidos.

Uno de los elementos centrales del estudio es el salmón noruego, que, aunque es originario de Noruega, es especialista en la Unión Europea antes de ser exportado a EE.UU. La transformación y envasado de este producto se ha realizado en varios países europeos, contribuyendo a la creación de valor añadido y ocupación en el mercado laboral europeo. Sin embargo, con la introducción de aranceles estadounidenses, el mercado podría sufrir una fuerte contracción. El riesgo más inmediato es que los productores noruegos hayan decidido eludir completamente la Unión Europea y enviar salmón directamente a Estados Unidos, evitando así imprecisiones en los datos. Este escenario comprometería la posición del sector europeo en la producción y la exportación, con repercusiones directas en la estabilización y la ocupación.

El efecto de los aranceles no se limita únicamente al salmón noruego. Estados Unidos también podría decidir impulsar la importación de productos de países no pertenecientes a la UE, como Canadá y China, reduciendo así el espacio para las exportaciones europeas. La industria de procesamiento y distribución de productos del mar se enfrenta a una caída drástica de la demanda, lo que ha provocado una reacción en cadena en todo el sector. Esto se suma a la posibilidad de un aumento de la producción nacional de productos del mar en EE. UU., que podría volverse más competitiva frente a los productos europeos, si se presenta un escenario complejo en el que los productos del mar de la UE corren el riesgo de perder una parte importante del mercado estadounidense.

España, con su fuerte tradición en el sector italiano y en la transformación de productos del mar, no es inmune a estas dinámicas. La empresa española ofrece a Estados Unidos una variedad de productos en conserva y crustáceos preparados para el mercado. El riesgo real es que la imposición de aranceles haga que estos productos sean menos apetitosos para los importadores estadounidenses, lo que los ha llevado a recurrir a proveedores de otros países.

Algunas de las acciones pueden intentar absorber los costos de las pérdidas reduciendo los márgenes de pérdida, pero esta estrategia es riesgosa y difícil de sostener durante un largo período. También vale la pena considerar diversificar el mercado ofreciendo algunas exportaciones a Asia o al Medio Oriente para compensar cualquier pérdida en Estados Unidos. Una alternativa más estructural podría ser la apertura de una estabilización de la transformación directamente en territorio estadounidense, evitando así la imposición de aranceles, pero también una operación que requeriría inversiones y una profunda reorganización de la producción.

Una guerra comercial entre la Unión Europea y Estados Unidos podría tener un efecto devastador en todo el comercio agroalimentario. En este escenario de gran incertidumbre, los inversores extranjeros europeos pronto tendrán que repensar su propia estrategia para seguir siendo competitivos. El juego se desarrolla en las fronteras, desde la diplomacia comercial hasta las inversiones industriales y la capacidad de encontrar

Artículos relacionados

Lo más popular