Una semana antes de la Semana del Océano en Bruselas y unos meses antes de la Conferencia de la ONU sobre el Océano en Niza, un grupo de investigadores de renombre internacional publicaá el próximo 23 de septiembre de 2024, «los resultados de un esfuerzo científico sin precedentes que redefinen el concepto de «sostenibilidad» y proponen once «reglas de oro» que desafían radicalmente la noción deficiente que prevalece actualmente en la gestión de la pesca». Estas once «reglas de oro» han sido concebidas para poner fin a la destrucción continua del océano por culpa de la pesca y restaurar la abundancia de las poblaciones de peces para alimentar a las generaciones futuras. Se presentan en un momento en que los científicos han determinado una reducción drástica sobre la evaluación del estado de salud del océano (1), y en el que dos tercios de los arrecifes de coral del mundo están expuestos a temperaturas potencialmente letales (2).
Estas once acciones están destinadas a ser implementadas por las empresas, los gobiernos y los legisladores.
Las reglas se basan en dos principios clave que buscan revolucionar el futuro de la explotación del océano:
La pesca debe minimizar los impactos sobre las especies y los ecosistemas marinos, adaptarse al cambio climático y asegurar la regeneración de la vida y los hábitats marinos agotados;
La pesca debe mejorar la salud, el bienestar y la resiliencia de los seres humanos y de las comunidades, especialmente de las más vulnerables, en lugar de servir a los intereses económicos de las empresas que concentran los beneficios mientras los ciudadanos soportan los costes.
Su artículo, titulado «Rethinking sustainability of marine fisheries for a fast-changing planet» («Replantear la sostenibilidad de las pesquerías marinas en un planeta en rápido cambio»), ha sido publicado hoy en la revista científica npj Ocean Sustainability del diario Nature. Esta iniciativa científica tiene como objetivo sentar las bases de una reforma destinada a transformar radicalmente la pésima gestión del mayor bien común del planeta. Los científicos llaman a los responsables políticos, distribuidores, pescadores y actores del sector a adoptar estas nuevas reglas y a movilizarse plenamente para implementarla.
«Urgencia de elaborar un nuevo marco de gestión de la pesca a escala mundial
Hoy en día, se reconoce a nivel mundial que la pesca es la principal causa de la destrucción del océano (3). En cincuenta años, el estado de los recursos pesqueros se ha deteriorado considerablemente: la proporción de poblaciones de peces explotadas de manera sostenible ha disminuido en una tercera parte (4). Los científicos se han reunido para trabajar juntos durante años basándose en un consenso unánime: la definición actual de «pesca sostenible» es deficiente y peligrosa. Conduce al agotamiento continuo de especies marinas, a la destrucción de hábitats marinos y sumideros de carbono, y a la desaparición de comunidades de pescadores artesanales en todo el mundo.
«El concepto actual de «pesca sostenible» utilizado por gobiernos y actores privados desde el período de posguerra está científicamente obsoleto. Se basa en una teoría simplista y productivista que supone que, mientras los volúmenes de captura globales se mantengan por debajo de un límite establecido, todos puedan pescar casi cualquier cosa, en cualquier lugar, con cualquier método», declaró el profesor Callum Roberts, autor principal del estudio. «¿Podemos realmente considerar que todas las artes de pesca son iguales desde un punto de vista ambiental y social? Actualmente, calificamos la pesca como «sostenible» sin tener en cuenta su impacto en los ecosistemas marinos o factores humanos, como la seguridad y los derechos de los trabajadores», agregó Jennifer Jacquet, profesora de Ciencias Ambientales y Política de la Universidad de Miami.
Los científicos critican el enfoque anticuado de la supuesta «sostenibilidad», que ignora factores cruciales tanto humanos como ambientales. A pesar de su aceptación generalizada por parte de los actores de la industria y los consumidores, las normas actuales de «sostenibilidad» no logran responder a los desafíos urgentes que plantea la crisis climática y el colapso de la biodiversidad. Por el contrario, respaldan prácticas industriales altamente capitalizadas que benefician a los países del Norte y perjudican los ecosistemas y las finanzas públicas, poniendo en peligro la pesca artesanal, la seguridad alimentaria y amenazando el empleo. Este modelo pone en riesgo el derecho universal de los seres humanos a un océano limpio, saludable y sostenible (5). Por ello, es urgente establecer una nueva gestión de la pesca a nivel mundial.
Una visión global del futuro de la pesca
Los autores llegaron a otro consenso: la pesca debe buscar minimizar los daños ambientales y maximizar los beneficios sociales para enfrentar los desafíos de un planeta amenazado por el hambre y el cambio climático. Este grupo de destacados investigadores ha desarrollado un enfoque visionario de la explotación de los océanos, basado en una definición global e interdisciplinaria de la «pesca sostenible», la cual integra conocimientos de biología, oceanografía, ciencias sociales y economía. Al enunciar las reglas de oro de la «pesca sostenible» desglosadas en dos principios y once acciones clave, su trabajo marca un punto de inflexión, proporcionando a los actores económicos y políticos las claves para una transición urgente hacia una explotación sostenible de los océanos a largo plazo.
Un nuevo paradigma para ecosistemas prósperos y recursos regenerados indefinidamente
Este nuevo marco de gestión de la pesca propone la visión de un mundo donde la pesca asegure el crecimiento de poblaciones de peces abundantes para satisfacer las necesidades de la humanidad a largo plazo. «Nuestro trabajo defiende prácticas pesqueras que preserven las funciones vitales de los ecosistemas marinos, mitiguen el cambio climático, garanticen la seguridad alimentaria y respeten los derechos humanos», declaró el profesor Daniel Pauly, reputado biólogo marino de la Universidad de British Columbia. Este enfoque innovador reconoce los roles sociales, éticos y ecológicos de la pesca, proponiendo un modelo sistémico sostenible que sea implementado por los actores del mercado, los responsables políticos y el sistema jurídico.
«Debemos considerar la pesca como un privilegio y no como un derecho. La vida marina es un bien público que debe beneficiar tanto a la sociedad como a la naturaleza, y no debe ser objeto de una carrera de recursos motivada por el lucro privado», enfatizó el profesor Callum Roberts. Sus propuestas son ambiciosas pero realistas: la mayoría de las acciones recomendadas se basan en medidas que ya han demostrado su eficacia en el marco de la gestión pesquera.
Llamado a la acción urgente
Los científicos instan a los responsables políticos, distribuidores y actores del sector a reconocer el fracaso del modelo actual de pesca y a adoptar urgentemente las reglas de oro propuestas. Los supermercados, que representan casi dos tercios de las ventas de productos del mar en Europa (6), juegan un papel crucial en esta transición. Pueden transformar las prácticas pesqueras modificando sus políticas de abastecimiento, influir en los estándares de «pesca sostenible» y responder a las crecientes preocupaciones de los consumidores sobre los impactos ocultos de su alimentación.
«Observamos una desconexión creciente entre la disponibilidad de productos del mar supuestamente sostenibles a gran escala, el colapso de los ecosistemas oceánicos y la frecuencia de las violaciones de derechos humanos reportadas. Los supermercados deben dejar de engañar a los consumidores», advirtió Pauline Bricault, responsable de la campaña de BLOOM sobre los mercados.
«El IPCC y la IPBES han fijado 2030 como fecha límite (7). Los actores de la industria ya no tienen excusas, deben actuar ahora». Mientras la ONU nos alerta sobre el preocupante nivel del aumento del nivel del mar en el Pacífico, así como una publicación científica en la revista Science advierte de la «sostenibilidad» de la pesca ha sido sobrestimada a nivel mundial, estas “once reglas de oro” llegan en el momento justo.