El pleno del Parlamento europeo ha aprobado el plan de gestión para el atún rojo que negociaron las instituciones a finales del pasado año y que prevé nuevas cuotas sectoriales para embarcaciones pequeñas, pero que finalmente fue rechazado por los Veintisiete porque consideran que da voz a los eurodiputados en cuestiones de competencia de los Estados miembros.
La falta de acuerdo entre el Consejo y la Eurocámara obligará a retomar las negociaciones y buscar el consenso en segunda lectura si se quiere pactar un nuevo plan para el atún rojo, necesario para trasladar a la normativa comunitaria parte del plan internacional para la gestión de este túnido capturado en el Atlántico oriental y en le Mediterráneo.
En un debate a principios de semana, el comisario responsable de Pesca, Virginijus Sinkevicius, se ofreció como «intermediario honesto» para tratar de superar las diferencias entre los Veintisiete y la Eurocámara y lograr un acuerdo «equilibrado».
Bruselas advierte, además, de la urgencia de contar con un plan que respete las recomendaciones del plan de ordenación de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (CICAA) para dar seguridad jurídica a las operaciones de la flota comunitaria.
El ponente de la posición de la Eurocámara, el socialista italiano Giuseppe Ferrandino, consideró «inaceptable» el giro dado por los Estados miembro, cuyos embajadores rechazaron lo acordado previamente con los negociadores del Consejo. Los Veintisiete tienen reservas porque consideran que el plan abre al Parlamento europeo cuestiones como el reparto de posibilidades de pesca, que es competencia exclusiva de los países.
El régimen negociado el pasado año entre el Consejo y el Parlamento apuesta por cuotas sectoriales para embarcaciones de pequeña escala y para barcos de cebo vivo en Azores, Madeira y las Islas Canarias.
También aboga por temporadas más largas de pesca en caso de que las condiciones climáticas sean adversas en el periodo inicialmente previsto y ofrece incentivos para el uso de artes de pesca selectiva o técnicas con poco impacto medioambiental.
El texto que finalmente ha respaldado la Eurocámara con 643 votos a favor, 11 en contra y 47 abstenciones defiende incrementar la capacidad pesquera en un 20% para la pesca con cerco, subir de un 5 a un 20% los límites de las capturas fortuitas como porcentaje del total de capturas y alargar siete días la temporada para la pesca con cerco (para cubrir el periodo del 26 de mayo al 1 de julio).
Postura italiana
Por otro lado, Italia que se juega mucho con esta especie, los eurodiputados de la Liga difundieron un escrito que decía que
«El atún rojo siempre ha sido una pesquería valiosa. En el debate en la UE sobre la modificación de la normativa, nos sorprendió el cambio de rumbo del Consejo, que se retractó después de haber alcanzado el acuerdo, una actitud irresponsable e insólita, que no puede ni debe repetirse. Pedimos un amplio apoyo a la medida, que hace hincapié en las características y necesidades específicas de la pesca artesanal, prevé excepciones para los buques pequeños y permite flexibilidad a los Estados miembros, no sólo en caso de crisis sanitaria, sino también en caso de condiciones meteorológicas adversas. Se trata de puntos importantes, por los que la Lega ha luchado para que se incluyan en el texto, con el fin de ayudar a los pescadores y a todo el sector. Nuestra batalla también se refería a la defensa de la pesca artesanal, proponiendo excepciones para los buques pequeños y pidiendo a los Estados miembros que den más cuotas a la pesca artesanal. Nuestras exigencias fueron aceptadas: es una victoria para la Lega, pero sobre todo para los pescadores. Hemos optado por apoyar a la pesca artesanal, a los trabajadores que se sacrifican en el mar, a los que hoy se ven sometidos a una dura prueba por las consecuencias de la pandemia y de años de normas excesivamente punitivas: ahora Italia y la UE también deben hacer su parte». Así lo han manifestado en una nota los eurodiputados de la Liga miembros de la Comisión de Pesca, Annalisa Tardino (ponente en la sombra de la medida), Rosanna Conte (coordinadora de ID en la comisión), Massimo Casanova, Valentino Grant y Lorenzo Viviani, jefe adjunto del Departamento de Pesca de la Liga