En lo que lleva del mes de marzo, los pesqueros han descargado más de 600 toneladas de anchoa en los puertos vascos

Los arrantzales vascos han descargado en las últimas semana más de 1.600 toneladas de verdel que se han cotizado en lonja a un precio un 27% superior al del año pasado. Los puertos de Getaria y Hondarribia han recibido la mayor parte. El Observatorio del Sector Pesquero Vasco, Arrantza Behatokia, ha explicado que las primeras capturas de verdel «se han hecho esperar» hasta la segunda quincena de marzo, donde los puertos guipuzcoanos de Getaria y Hondarribia han recibido la mayor parte, 480 y 400 toneladas de verdel procedentes de pesqueros vascos, respectivamente, mientras que Ondarroa descargaba 220 toneladas de verdel originarias de buques vascos.

En total, los pesqueros vascos han descargado más de 1.600 toneladas en la tercera semana de marzo y han alcanzado una cotización en lonja que ha superado el euro por kilo. Este precio es un 27% más elevado que el conseguido en las mismas fechas el año pasado, cuyo registro se situaba en los 85 céntimos de euros por kilo. Una vez localizada la especie, para los próximos días «se esperan descargas más cuantiosas».

Asimismo, en lo que se lleva del mes de marzo, los pesqueros vascos han descargado más de 700 toneladas de anchoa en los puertos vascos. La especie, que ha venido mezclada con sardina, ha obtenido un precio «ciertamente bajo», situándose por debajo del euro como media durante este mes de comienzo de campaña (83 céntimos el kilo).

La cotización en lonja supera el euro por kilo

La mayor parte de los ejemplares se han presenciado en el puerto de Ondarroa, donde hasta ahora ha comercializado la mitad de las descargas (a un precio medio de un euro/kg), mientras que el segundo puerto más importante, el de Getaria, concentra un tercio del volumen capturado hasta la fecha por cerqueros vascos (a 75 céntimos de euro el kilo).

La práctica totalidad de las capturas se han destinado al consumo en fresco, por lo que los supermercados y las pescaderías ya han realizado las primeras ventas de anchoa de esta temporada. Se trata aún de ejemplares de pequeño tamaño, de 60 a 70 piezas en el kilo, lo que repercute en su ajustado precio en lonja, debido a que las conserveras se reservan para ejemplares de mayor tamaño.

A pesar de ello, el sector pesquero se muestra «esperanzado» por estas capturas que han dado inicio a la campaña. Arrantza Behatokia ha recordado las «serias dificultades» que afrontaron en la pasada campaña que fue «fuertemente golpeada» por la pandemia de covid-19.

Enero y febrero

En los dos primeros meses del año, las cofradías vascas han comercializado cerca de 1.800 toneladas de pescado, cifras muy similares a las del año pasado en las mismas fechas. La especie que más se ha descargado es la sardina, 1.400 toneladas en total, con un valor en lonja de casi un euro por kilo (97 céntimos de euro), 27 céntimos más caro que el año pasado. Se trata principalmente de sardina descargada por pesqueros de comunidades autónomas limítrofes; los buques vascos han descargado 420 toneladas de sardina.

A cierre de febrero no se registraron descargas importantes de verdel. Las expectativas de los arrantzales es que la costera de este año sea «más rentable» que la de 2020, que fue «fuertemente golpeada por la pandemia y el confinamiento».