Entre dos grandes masas de tierra y agua, España es la puerta de Europa y el puente de unión con África. Su ubicación geográfica y su disposición peninsular convierten a España en un entorno privilegiado. Un país rico en flora y en fauna, con especial acento en la vida en el agua. Y todo ello, gracias a sus más de 8.000 km de costa y sus 9 grandes ríos. Por no hablar de los lagos, embalses y ríos afluentes. Todos en su conjunto constituyen el agua de cultivo del pescado de Acuicultura de España.
El sector de la acuicultura de España es ya un referente a nivel europeo y mundial. Pese a la fuerte competencia sufrida por el pescado de otros países como Turquía, el cultivo de especies acuáticas en España no deja de crecer. Y es que, este sector es el resultado de la perfecta suma entre riqueza hidrográfica, valor humano y compromiso por la calidad y la seguridad del consumidor. ¡Te descubrimos por qué elegir pescado de cultivo made in Spain!
A la cabeza de la UE
Quizá te sorprenda saberlo, pero la acuicultura de España está a la cabeza en nivel de cosecha acuícola de pescado del conjunto de la Unión Europea. Y es que, el 25,5% del pescado cultivado en el continente tiene sello español. Es más, el Reino Unido y Grecia son los únicos países que superan en volumen de producción a los datos de la acuicultura de España, según se desprende del último informe de APROMAR.
Unos datos que sería imposible conseguir sin el trabajo y el esfuerzo de los más de 46.000 profesionales que trabajan en el sector de la acuicultura de España. Profesionales repartidos en los 5.075 establecimientos que el sector tiene ubicados en toda la geografía peninsular y también en los dos archipiélagos. Ellos son las manos y las mentes que mueven un sector cuyo principal objetivo es el cultivo de un alimento saludable y de calidad con el que asegurar la seguridad alimentaria de la población.
Razones para consumo
Si te encuentras ante el mostrador de pescado y no sabes qué ejemplar comprar para la cena, nuestra recomendación es que te decantes por pescado de acuicultura de España. No son menores las razones que lo convierten en un producto estrella, sinónimo de calidad, frescura y seguridad. Es importante que prestes atención a las siguientes recomendaciones, pues es muy probable que en tu pescadería o supermercado de confianza también vendan pescado cultivado en otros países cuya legislación y control están muy alejadas de la realidad de la acuicultura de España.
Un requisito esencial en la compra de pescado son los controles de calidad y seguridad. La acuicultura de España está sometida a los más estrictos controles para que el pescado que llegue hasta tu mesa sea garantía de seguridad. Sin embargo, en otros países, los requisitos de calidad y certificación del pescado son menos severos. Y claro, esto también se ve reflejado en precios más bajos.
Por eso es tan importante que, en temas de alimentación, no nos dejemos llevar por el atractivo de un menor precio y prioricemos nuestra seguridad. ¡Cuando se trata de alimentación, cualquier precaución es poca!
La cercanía hasta tu mesa es el primer motivo que marca la diferencia. Y es que la cercanía se traduce en un extra de frescura. Una de las principales características de esta actividad es que el producto tarda menos de 24 horas en llegar al punto de venta. Mientras que, si es importado de otros países, puede tardar hasta 6 días en llegar hasta el supermercado. Además, con esta decisión contribuirás a cuidar el medioambiente, pues al reducir la distancia de transporte, se reduce también la huella de carbono. ¡Elegir acuicultura de España son todo ventajas!
Además, su cultivo está controlado al 100% por expertos del sector. ¿Qué significa esto? Que cuando vayas a consumir pescado de acuicultura de España disfrutarás de un producto que está libre de anisakis y microplásticos. Y, por supuesto, que no contiene antibióticos. ¡La trazabilidad está asegurada!
De nuevo, no ocurre lo mismo con el producto que nos llega importado de otros países, pues son alimentados con piensos no controlados sin cumplir con las normas establecidas por la Unión Europea. ¡Nada que ver con el pescado cultivado por Acuicultura de España! Es más, el pescado cultivado en nuestras aguas tiene el gran punto a favor de contar con un alto grado de certificación.
La IFS Food, que reconoce la calidad de los productos procesados o envasados; la Global G.A.P., que contempla las buenas prácticas ganaderas; o el sello Crianza de Nuestros Mares para los ejemplares de lubina, dorada y corvina, son solo algunas de las certificaciones de calidad más importantes con las que cuenta el pescado de acuicultura de España.
Otra razón que no puedes pasar por alto es que comprando pescado de acuicultura de España estarás apoyando al crecimiento económico y social de las regiones en las que se desarrolla. Estarás apoyando el empleo en zonas clave como la costa gallega, la valenciana o la murciana. Sin olvidar a los profesionales de la acuicultura continental de las dos Castillas, de Andalucía, Cataluña o la Rioja. ¡Y así, una larga lista de poblaciones españolas donde la acuicultura es un motor económico fundamental!
Reconocer el pesca acuícola
Y ahora la gran pregunta, ¿cómo reconozco el pescado de acuicultura de España? Es sencillo: solo tienes que fijarte en la etiqueta que debe acompañar al ejemplar, tanto si es congelado como fresco. Hacer este simple gesto antes de elegir el pescado que vas a comprar marca la diferencia. Además, la información de las etiquetas te ayudará a saber si es un ejemplar de cultivo, si ha sido descongelado o su fecha de consumo preferente. ¡Información básica para una compra responsable de pescado!