Los meses de julio y agosto las 24 embarcaciones de arrastre de Vinaròs y Benicarló llevaron a cabo la parada biológica para fomentar el mantenimiento y la regeneración de las especies del Mediterráneo. Mes y medio después de volver al mar, la valoración de ambos puertos es muy positiva. Como nexo común se encuentra la regeneración del salmonete.
Así, destaca un aumento en las piezas encontradas y también en su tamaño. En el caso de Benicarló, también resaltan un aumento en la presencia de merluza. Con todo, desde COINCOPESCA se destaca la importancia de las paradas biológicas para activar la regeneración natural de las especies y se recuerda que, por ejemplo, los puertos de la provincia de Castellón realizan paradas voluntarias desde hace años.