La pesca controlada de anchovetas es la única manera de conservar a esta especie, crucial para la industria pesquera del Perú. No obstante, existe una gran amenaza: la pesca de anchovetas juveniles que no cumplen con la talla mínima, según Mongabay-
La legislación peruana establece un límite de 20% de anchovetas juveniles para la carga de un barco que llega a puerto. En el caso que analizamos, pesquera Diamante, una de las siete más grandes del país, registró algunos desembarques en los que más del 90 % de la pesca eran pequeñas anchovetas y logró reducir las multas con las que había sido sancionada a menos de una tercera parte, incluso logró que el Poder Judicial emitiera una medida cautelar en el 2016 para que Produce no la volviera a multar. Luego de tres meses, el tribunal retrocedió, le dio la razón el Estado peruano, pero Diamante ya había alcanzado a pescar al menos 1075 toneladas de juveniles. ¿Cómo sucedió esto?
“El Ministerio, consciente de sus limitaciones, sabe que hay un montón de multas pendientes por pagar”, explica Carmen Heck, abogada especializada en derecho pesquero, directora de políticas en Oceana
Pesquera Diamante es una de las beneficiadas con 10 millones de soles por Reactiva Perú. Un programa gubernamental que fue ideado para ayudar a las pequeñas empresas golpeadas por la crisis del COVID-19, pero que ha destinado, en medio de una polémica, los préstamos más fuertes a las compañías más rentables del país.
