Nueve barcos de recreo participaron en la prueba, en la primera Tuna Ragging Race que permitirá a los biólogos profundizar en el comportamiento de esta especie. La primera competición de marcaje electrónico de atún rojo para pesca deportiva, que tuvo lugar semana en aguas de Bermeo, permitió identificar a varios ejemplares de esta especie de entre los que destacó una «enorme» pieza de 185 centímetros y 130 kilos. Los participantes en la prueba, que se desarrolló con fines científicos, registraron cuatro marcas convencionales y una ‘pop up’ interna, que proporcionará datos precisos de localización del atún rojo a los biólogos.
«Dicho así parecen pocos, pero teniendo en cuenta que normalmente no se marca nada, se trata de una cifra extraordinaria», aseguraron fuentes del instituto de investigación marina Azti. El evento deportivo, organizado por la asociación Bermeo Tuna World Capital, que promueve la gestión sostenible en torno al atún como recurso natural, contó con la participación de nueve tripulaciones, tanto del País Vasco como de procedencia estatal e internacional.