El Juzgado Penal de Nantes ha condenado a nueve acusados de edades comprendidas entre los 24 y los 67 años, por un delito de tráfico de angulas. Los acusados habían comparecido durante dos días a principios de diciembre en el contexto de un gran tráfico internacional de angulas siéndoles comunicadas la sentencia la pasada semana. Las sentencias van desde un año de prisión hasta dos años de prisión. Se acompañarán de multas individuales que van desde los 5.000 a los 30.000 euros.
Ocho de los nueve acusados también deberán pagar una multa total de 230,000 euros por daños ecológicos. Según el tribunal, este grupo había constituido un grupo para transportar anguila al mercado asiático .Los acusados tienen diez días para apelar la sentencia.
En este caso, la Agencia Francesa para la Biodiversidad (antes Oficina Nacional de Medio Ambiente Acuático y Acuático) estaba intrigada por las “distorsiones muy significativas” entre las declaraciones de venta de varios pescadores en el estuario del Loira, que concentra la mitad de la producción francesa, y la de los mayoristas que habían comprado sus producciones. La interceptación telefónica, junto con las geolocalizaciones de teléfonos móviles y la información del los peajes habían puesto de relieve cuatro viajes sospechosos al País Vasco español y otros dos a Saint-Pompain (Deux-Sèvres), cerca de Niort. No obstante, los movimientos en la Península Ibérica se consideraba una “etapa de tránsito” hacia el sudeste asiático.
Exportaciones “al Reino Unido y Filipinas”
En el corazón del tráfico, estaba Seasaneels, una compañía en Saint-Nazaire (Loire-Atlantique) dirigida oficialmente por Simon Le Cossec. El pescadero de 57 años era un empleado, al igual que su hijo Bryan, de 24 años.
Ausente en el juicio, Simon Le Cossec había admitido a los investigadores sus “actividades ilegales”, según el presidente. Sus escuchas telefónicas, que habían continuado después de su audiencia, habían revelado que había reanudado … solo seis semanas después de su acusación. Él estaba buscando exportar angulas “al Reino Unido y Filipinas”, según los investigadores.
Por su parte la mayoría de los pescadores furtivos también acusados provienen de la comunidad Traveller, y algunos ya han sido condenados por participar en un importante contrabando de cannabis.
Incautaciones
El primer día del juicio también hubo la oportunidad de escuchar a otros acusados, como Gaëtan Bonnet, un pescador profesional de Sainte-Luce-sur-Loire (Loire-Atlantique) de 48 años, que trabajaba bajo el estatus de pequeño contratista. “Hace treinta años que trabajo por cuenta propia y no tomo vacaciones: prefiero poner mi dinero en otra parte”, defendió en la audiencia, admitiendo simplemente “no haber declarado todo” en términos de ingresos.
Como parte de la investigación, el tribunal le confiscó un Range Rover y 142 000 euros ahorrados en las cuentas de sus seis hijos. En general, las incautaciones realizadas por los investigadores (barco, Harley-Davidson, Porsche 928 S4 …) han sido desmesuradas. Las escuchas telefónicas también revelaron “contactos” con “italianos de origen asiático” para comprar “siete a ocho toneladas” de alevines de anguila.