El primer dron marino comienza a trabajar en Polinesia

El primer vuelo del dron marino polinésico Nera tendrá lugar hoy según una experiencia que viene desarrollándose por la start-up polinesia Moana. Esta iniciativa ha fabricado su primer prototipo de dron marino. Bautizado como Nera, está previsto que realice su primer viaje el 27 de septiembre entre Tahití y Moorea.

Este monocasco de 6,10 metros de eslora tiene propulsión eléctrica y un sistema de navegación. Autónomo, está dotado de una inteligencia artificial básica que le permite evitar obstáculos y aprender mientras navega. Tiene un bajo consumo de combustible y puede navegar hasta 8 nudos. El Nera se fabricó con carbono Kevlar mediante una impresora 3D.

La principal característica de este dron marino es que está diseñado, fabricado y operado en la Polinesia. Se desarrolló teniendo en cuenta los limitados recursos industriales y materiales de las islas polinesias», explica Raitini Rey, uno de sus diseñadores. La idea es dotar a nuestro territorio de una tecnología accesible y con muchas posibilidades de aplicación. Podría utilizarse para la limpieza del lugar, el transporte, la vigilancia (de los barcos o de los DCP a la deriva), la recogida de datos…

Se desarrollarán otros drones en otros formatos, catamaranes, trimaranes, con o sin velas rígidas. Lo principal en este momento es el desarrollo de todo un ecosistema: sistema de navegación, acoplamiento de accesorios, sensores de datos, centros de fabricación y mantenimiento en islas remotas. «Lo más importante es que haya una cadena de valor completa. Tenemos con Nera unos 20 conceptos para desarrollar».

Antes de fin de año, Nera navegará de Tahití a Bora Bora, haciendo escala en todas las islas del archipiélago de la Sociedad antes de regresar directamente a Tahití.