Europa Azul

La III Jornada de la flota de cerco de la Asociación de Armadores de Cerco
de Galicia – OPMEGA – celebrada, en el salón de plenos del Ayuntamiento de Sada, debatió sobre las prácticas de pesca sostenibles, haciendo hincapié en las prácticas para evitar capturas no deseadas, en especial, el slipping, y en la repercusión de la orden OMNIBUS.

En la propia jornada se subrayó la importancia de la realización de este tipo de eventos para el sector. Evento que inicialmente estaba previsto que se realizase en el mes de marzo pero que con motivo de la actual pandemia y el decreto de estado de alarma en nuestro país tuvo que ser pospuesto.
En el acto de inauguración Juan José Blanco estuvo acompañado de la Conselleira do Mar, Rosa Quintana, y del alcalde del ayuntamiento de Sada, Benito Portela. Durante su intervención Quintana destacó que en la organización de ese tipo de eventos reside la convicción de cuidar “nuestro medio marino con el objetivo de hacer que nuestra actividad sea sostenible en los ejes social, ambiental y económico”. Por ello reconoció la labor de la Asociación de Armadores de Cerco de Galicia en la organización de la jornada, máxime en el contexto actual, y felicitó a la organización por su reconocimiento como organización de productores pesqueros hace dos años, y que actualmente representa a más de 100 asociados en la defensa del cerco como arte de pesca. A continuación, inauguró de forma oficial el acto, Benito Portela, Alcalde del ayuntamiento de Sada,
quien destacó tres aspectos fundamentales el ambiental, el socio-económico, destacando que momentos de crisis como el actual ponen de manifiesto la necesidad de incrementar la importancia del sector primario en el peso económico; y el social y cultural, incluso, etnográfico,
incidiendo en la recuperación de artes de pesca sostenibles.

Asimismo, Portela hizo un llamamiento a qua la Política Pesquera Común se adapte a las especificidades de Galicia. Andrés García, representante de ACERGA, fue el encargado de moderar la jornada y también el responsable de realizar la primera ponencia bajo el título de “Adaptaciones de la flota de cerco de Galicia a la PPC”. Durante su exposición Andrés García destacó que el cerco tiene 3 especies principales: sardina, jurel y caballa. Debido a la escasez de cuota de sardina con el plan de recuperación en el que se encuentran, de caballa de la que tiene una cuota escasa y de la presencia
testimonial por Galicia de la anchoa, la flota del cerco tiene basada su pesquería en el jurel. Desde hace 2 o 3 años están viendo unas pescas masivas de jurel por barcos de más porte, situación que genera una gran preocupación. Si falla el jurel el cerco de Galicia estará en un problema serio.
Desde la organización están convencidos de la necesidad de regular el caladero atendiendo a tres aspectos: medioambiental, social y económico. Por ello desde la organización han promovido la regulación que implique a todos los barcos del caladero. En dicha propuesta se contempla un tope
de 750 kg por tripulante y día, que los asociados de ACERGA vienen cumpliendo desde hace 3 años.

Protección del caladero

Esta propuesta fue trasladada a la Federación Gallega de Cofradías y en votación fue aceptación en su mayoría. Así, ACERGA ha estado trabajando en una norma de extensión que contemple ese límite
de descarga de aplicación a cualquier barco que descargue en puerto de Galicia. A continuación, Genma Laso habló del “Pasado, presente y futuro de ACERGA”, destacando el reconocimiento de ACERGA como organización de productores pesqueros en 2018 y su actual representatividad en el arte de cerco. Asimismo, también expuso las implicaciones que conlleva ser
una organización: explotación sostenible de los recursos, mejora de la competitividad de los productores, incremento de la transparencia y estabilidad de los mercados en la cadena de valor, entre otras. Desde su reconocimiento como organización de productores pesqueros ACERGA está
ejecutando medidas que atienden a esas implicaciones: edición de boletines trimestrales, elaboración de un catálogo de formación, desarrollo de herramienta de gestión pesquera, elaboración de un protocolo de buenas prácticas ara prevención y reducción de capturas no deseadas, entre otras. Este es su presente, pero a futuro sus retos serán la sostenibilidad, la gestión del recurso y la mejora de la comercialización. De esta forma Genma destacó, asociado al reto de sostenibilidad, el proyecto Tarject 75 de la ONG Sustainable Fisheries Partnership que tiene por objetivo que el 75% de las pesquerías estén certificadas o en un proyecto de mejora pesquera.
Asociado al reto de gestión del recurso destacó la importancia del intercambio de cuotas, de la obligación de desembarque y de la interpretación de los datos, para lo cual resulta fundamental el
trabajo conjunto del sector, la administración y la comunidad científica. El último reto requiere trabajar aspectos de diferenciación, innovación y valorización de especies y del oficio. Respecto a la valorización destacó la campaña en la que la organización está trabajando “O cerco, un xeito de vida”.
Posteriormente el turno correspondió a Julio Valeiras, investigador del Centro Oceanográfico de Vigo de IEO, que presentó las Prácticas para evitar capturas no deseadas: slipping. En el curso de su exposición dio respuesta a cuestiones tales como qué son los descartes, cuándo se producen, por
qué se producen o cómo se reducen. Destacó que el cerco es una pesquería con unas tasas de descarte baja y que lleva a cabo técnicas de selectividad activa como es el slipping. También presentó diferentes trabajos de alta supervivencia que han realizado diferentes grupos de investigación, como es el caso de los estudios de supervivencia de la sardina; estudios de comportamiento de cardumen; estudios de liberación de delfines u otras técnicas relativas a la modificación de tamaño de la malla.
Como punto final a su exposición reiteró su propuesta de colaboración con el sector en el fomento de prácticas de pesca sostenibles.

La orden Omnibus

La última ponencia, a cargo de Héctor Villa, Subdirector General de Caladero Nacional y Aguas de la Unión Europea de la Secretaría General de Pesca, versó sobre la “Repercusión de la orden OMNIBUS sobre la flota de cerco” durante la que expuso los principales elementos que afectan a la flota de cerco. La orden OMNIBUS representa un desarrollo importante y significativo de la gestión pesquera que se venía realizando en el Caladero Nacional tanto del Cantábrico Noroeste como de Golfo de
Cádiz y aguas de Portugal, y ha supuesto cambios muy significativos en las órdenes que venían regulando estas pesquerías y en aspectos más horizontales para avanzar en una gestión más óptima de las cuotas que se le asignan a España bajo la PPC de las diferentes especies. Centrándose en la flota de cerco, destacó aquellos artículos que afectan más directamente a la
gestión de su actividad relativos a las transmisiones temporales y definitivos de posibilidades de pesca; el mecanismo de optimización anual del uso de cuotas que permite aprovechar aquellos sobrantes de las asignaciones que existan en el último trimestre y el establecimiento del
procedimiento a seguir. Como novedad, destacó el artículo 8 relativo a los intercambios de cuotas con otros estados miembros. Hasta la fecha en el ordenamiento español no se regulaba de una forma clara y ahora la orden OMNIBUS identifica las diferentes casuísticas que se pueden dar.
Por último, destacó otros dos artículos relativos a la gestión del jurel de la zona 8b y el reconocimiento de una realidad que ya se contempla en la normativa comunitaria sobre el uso de condiciones especiales, es decir, la posibilidad de transferir un porcentaje de cuota entre diferentes
stocks, como es el caso del jurel de dos poblaciones diferentes: 8c y 9.
En el acto de clausura, dirigido por Andrés García, que en este momento estaba acompañado, vía streaming, por la Secretaria de Pesca, Alicia Villauriz, quien agradeció en primer término la oportunidad de acompañar a ACERGA en este evento y destacó la importancia de este tipo de jornadas donde se debaten aspectos esenciales en relación con la flota de cerco. También destacó el importante esfuerzo de ajuste y adaptación que realizó esta flota a las directrices de la PPC como marco de referencia. En ese ajuste y adaptación la conservación medioambiental es importante pero la rentabilidad económica tiene que serlo también, de lo contrario la actividad terminaría diluyéndose. En el avance hacia la sostenibilidad, otro de los retos a los que se ha enfrentado la flota ha sido la eliminación de los descartes y la obligación de desembarque, un elemento técnico que es difícil de cumplir sobre el que es necesario dar oportunidades y flexibilidades y eso es lo que se ha pretendido hacer primero desde punto de vista científico, para darnos opciones desde el punto de vista de la
selectividad y técnica pesquera, y desde el punto de vista normativo, responsabilidad de la administración, dando flexibilidades para que la flota se pueda adaptar.
Asimismo, destacó que es difícil llegar a acuerdos en el ámbito de la UE para conseguir las cuotas en el volumen suficiente y sería imperdonable que esas cuotas se dejasen de pescar porque esas cuotas cumplen los estándares medioambientales que deben cumplir. Es necesario no dejar de pescarlas porque el utilizar las cuotas representa riqueza; riqueza para el sector y para las regiones donde se asienta el sector y para el conjunto del país.
El diálogo con el sector, reconoce la Secretaria, ha permitido configurar una orden ministerial para cubrir estas necesidades; siendo así uno de los mayores exponentes del trabajo conjunto entre organismos científicos, administración y sector para que esa gestión de cuotas se realice de la
manera más eficaz posible. Por último, felicitó nuevamente a la organización por el paso dado por su reconocimiento como organización de productores pesqueros, OPP-82, dando un paso más allá de la pesca extractiva avanzando en cuestiones que ayudarán a mejorar su rentabilidad como la comercialización y trabajar con un enfoque de futuro es fundamental.