Fedepesca está dispuesta a afrontar el profundo cambio en la distribución comercial. En el año 2007 había en España 14.833 locales comerciales dedicados al comercio de productos pesqueros. En 2016 eran 9.905 locales (último dato proporcionado por el Instituto Nacional de Estadística). Se han cerrado un tercio de los locales. Por el contrario las grandes empresas aumentaron la superficie destinada a la venta de alimentos en más de dos millones de metros cuadrados.
Mª Luisa Alvarez Blanco. Directora Gerente Fedepesca
Cerramos un 2018 en el que el comercio especializado de productos pesqueros sigue haciéndose más pequeño. Perdemos nuevamente cuota de mercado en la venta de productos pesqueros, más por pérdida de peso en la superficie comercial destinada a la venta de alimentación que por bajada de ventas individuales de cada tienda.
Las grandes cadenas siguen abriendo tiendas de proximidad con una apuesta clara por los frescos, en una lucha por conseguir visitas a tienda y ganar cercanía. El modelo de gran tienda en las afueras está agotado, derivado de los profundos cambios sociales que estamos viviendo con la irrupción de las nuevas tecnologías, que han modificado de forma radical los hábitos de consumo de alimentos, sin vislumbrar hasta donde van a afectar a los consumidores en sus hábitos.
Una de las grandes conclusiones en esos cambios es paradójica. Cada vez consumimos menos alimentos frescos, pero son los más importantes para asegurar la visita a tienda. Los estudios concluyen que el retroceso de la tienda especializada, conlleva un retroceso en el consumo de frescos. En el caso de la pescadería, adquirimos un 25% más de producto cuando acudimos al especialista. El retroceso de nuestro canal es una mala noticia para la salud de los españoles. De hecho, hemos pasado de un consumo de 27, 2 kilos por persona y año en hogares en 2013 a 23,7 kilos en 2017. Las últimas cifras, de Octubre de 2018 siguen apuntando una nueva caída, y siguen siendo los frescos los que contribuyen en mayor medida al descenso en volumen de la categoría, que pierden un 4,8% del volumen frente a la caída del 1,6% de los pescados congelados. Sólo las conservas y los refrigerados se mantiene en términos positivos.
Pescadería
En nuestro país cada vez más consumidores optan por realizar sus compras de alimentación en los supermercados, según nos muestran las estadísticas recopiladas del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA). El canal supermercado y autoservicio recibe el 46,2% del gasto total en alimentación en 2017.
Respecto al personal ocupado en 2007 el comercio especializado en productos pesqueros empleaba a 26.237 personas frente a los 20.807 ocupados en el año 2016(último dato del INE). La buena noticia es que la destrucción de empleo se frenó en 2014, con ligeros incrementos en los dos años siguientes. Las grandes empresas emplean a 60.000 personas menos, a pesar del incremento de la superficie.
Otro de los problemas a los que se enfrenta el sector especialista en venta de productos pesqueros es el envejecimiento del personal ocupado. La falta de relevo generacional una de las amenazas mayores del canal especialista, agravada por la falta de una formación profesional pública durante los últimos 60 años, que ha impedido contar con una cantera de jóvenes profesionales formados en los cambios que exige el mercado actual. Afortunadamente 2018 fue el año en el que se publicó el primer título de Formación Profesional de la historia en Técnico en Comercio de Alimentación, que confiamos pongan en marcha en 2019 las Comunidades Autónomas.
A pesar de las cifras, somos optimistas. Nuestro comercio es un sector con futuro. De hecho, las empresas lideradas por emprendedores que se han ido adaptando a los cambios mantienen buenas cifras de ventas. Profesionalidad y oficio como seña de identidad, pero también innovaciones en el punto de venta que mejoren el servicio y la experiencia de compra. Las tendencias en la pescadería para 2019 podrían resumirse en:
Producto fresco
• Elaboraciones artesanales. Cada vez más productos listos para comer elaborados por los profesionales. Facilitar la vida al consumidor pero sin perder el carácter saludable de los alimentos que ofrecemos.
• Degustación en el punto de venta. Catas de estos productos, de marisco cocido, de ostras, como forma de mejorar la experiencia de compra. Estamos trabajando con gran intensidad en que la degustación sea una actividad complementaria más en el comercio. No debemos de olvidar que la venta de los establecimientos de hostelería para consumir comidas en casa también está afectando a nuestra facturación.
• Sostenibilidad, no sólo respecto al producto, sino también económica y social. Poner en valor la exigente legislación pesquera europea y española, el origen de los productos y al sector pesquero como fuente de riqueza para nuestros territorios. La movilidad sostenible también es un reto que nos afecta muy directamente, al manejar un parque de diez mil furgonetas.
• Reivindicar nuestra responsabilidad en la cultura y tradiciones gastronómicas. Vendemos alimentos que son parte de nuestra riqueza cultural y gastronómica, y la red de pescaderías española es única en el mundo.
Pesquero
• Economía circular. La reducción del uso de plásticos es una prioridad, en nuestro caso más, como sector afectado especialmente por la presencia cada vez mayor en los mares de plásticos, con el efecto negativo que tiene ello para los productos del mar. Nuevos envases biodegradables, concienciación de los consumidores y puesta en valor del comercio especializado como puntos de venta a granel con menor generación de residuos está en nuestra estrategia.
• Economía Azul. Nos reivindicamos como una parte de la economía que reconoce la importancia de los mares y los océanos como motores de la economía por su gran potencial para la innovación y el crecimiento.
• Digitalización. Nuestras pequeñas empresas deben de digitalizar al máximo la gestión y los procesos, para reducir sus costes y mejorar sus cuentas de resultados. El marketing digital también es una herramienta fundamental para fomentar la venta en la tienda física.
• Comunicación. Mejorar la percepción de los consumidores respecto a nuestros productos e informarles con rigor y sin alarmismo es fundamental, frente a las permanentes noticias negativas relacionadas con la alimentación en general y con los productos pesqueros en particular. Demandar de las Administraciones Públicas mayor involucración de la defensa de los alimentos saludables, también con medidas como la reducción del tipo impositivo del IVA, es una prioridad.
Todos los proyectos y políticas de Fedepesca se orientarán en este año en torno a estos ejes, para apostar por un especialista artesano, innovador, que ofrece mejores y mayores servicios a un consumidor al que ayuda a llevar una dieta saludable.