El sector del pescado alternativo está evolucionando muy rápidamente, según el Good Food Institute que certifica que las ventas de productos del mar de origen vegetal en Estados Unidos crecieron en 2020 crecieron un 23% hasta alcanzar los 12 millones de dólares. Eso no es mucho comparado con el mercado tradicional de los productos del mar, que se estima en decenas de miles de millones de dólares, aunque hay que señalar que el sector está evolucionando muy rápidamente.
Los expertos observan un creciente interés de los inversores por las empresas «de pescado alternativo». Según el Good Food Institute, en 2020 se han invertido más de 80 millones de dólares en el sector de los productos del mar de origen vegetal, cuatro veces más que en 2019. Más de 80 empresas de todo el mundo se dedican a la producción de productos marinos alternativos.
El interés por los peces artificiales se ha visto alimentado por la preocupación por la sobrepesca, pero también por los informes sobre el contenido de metales pesados y microplásticos de los peces normales. Entre los consumidores potenciales se encuentran no sólo los veganos, sino también las mujeres embarazadas que temen el mercurio del pescado, y las personas con alergias alimentarias al pescado y al marisco.
El Good Food Institute calculó en junio de 2021 que había 83 empresas de pescado alternativo en todo el mundo, de las cuales 65 se centraban en alimentos de origen vegetal. En 2017, solo hubo 29.
Las grandes empresas también se fijan en el mercado de los peces artificiales
Tanto las pequeñas empresas de nueva creación como las grandes están interesadas en los productos de pescado artificial. En 2020, Nestlé empezó a producir atún vegetal a base de proteína de guisante y gluten de trigo.
Van Cleve Seafood, una empresa de Virginia que lleva más de 20 años vendiendo marisco tradicional, se pasó a la producción vegetal debido a los problemas de la industria pesquera, como el trabajo infantil y la sobrepesca.
El fabricante francés de alimentos Odontella SAS vende salmón ahumado a base de plantas y proteínas de algas y guisantes en supermercados especializados de toda Europa. Las algas utilizadas en la producción contienen ácidos grasos omega-3, similares a los del pescado normal.
La empresa estadounidense Kuleana se ha centrado en la producción de atún vegetal crudo de alta calidad, apto para el sushi y los sándwiches.
La empresa española Mimic Seafood produce atún artificial a base de tomate bajo la marca Tunato (atún con tomate) y ofrece a los clientes tanto «pescado» sin procesar que puede utilizarse en la cocina como sushi ya preparado.