Investigación

El cambio climático afecta a la población de sardinas del Mediterráneo

El cambio climático afecta a la población de sardinas en el Mediterráneo, según una programa realizado en el Golfo de León que ha demostrado que estas especies se alimentan ahora de plancton más pequeño y menos nutritivo, lo que explica el descenso de su biomasa en el Mediterráneo. La culpa es del cambio climático.

En los últimos diez años, las sardinas del Mediterráneo han perdido casi un tercio de su tamaño, pasando de 15 a 11 cm de media. Sólo pesan 10 gramos en lugar de 30, y la edad de madurez sexual se ha reducido drásticamente a un año. «El número de individuos es casi el mismo, pero los peces están en mal estado», recordó Claire Saraux durante la presentación de los resultados del programa Mona Lisa (1), liderado por el Ifremer entre 2017 y 2020.

En Sète, el investigador ya había coordinado un primer estudio en 2016, en el que se demostraba que el repentino colapso de la pesquería, que destruía la pesca de arrastre del sur, se debía a un cambio en el fitoplancton, que se había reducido. Para entenderlo mejor, los científicos estudiaron el largo plazo, utilizando el seguimiento por satélite y los datos históricos: en 30 años, la temperatura del agua ha subido 0,6°C en el Mediterráneo occidental y las condiciones atmosféricas han cambiado.

«Al superponer las curvas, podemos ver los cambios simultáneos entre el tamaño de los pequeños peces pelágicos y las condiciones ambientales», explicó Jean-Marc Fromentin, investigador de la estación de Ifremer en Sète. La evolución de la calidad del Ródano también plantea interrogantes, con una disminución de los aportes de nitrógeno y fosfato, y menos nutrientes.

Seguimiento de 500 sardinas

Paralelamente, se realizó una serie de pruebas con alimentos. Cerca de 500 sardinas, recogidas y transferidas a los estanques de la estación de Ifremer en Palavas-les-Flots, fueron alimentadas durante siete meses con pellets de dos tamaños, a diferentes volúmenes de alimentación. El resultado fue que las sardinas engulleron los gránulos grandes de 1,2 mm pero filtraron los gránulos de 0,1 mm a través de sus branquias. Este nivel de filtración implica un largo nado continuo y el doble de gasto energético», señala Claire Saraux, que desde entonces trabaja para el CNRS. Y a pesar de su adaptación, las sardinas no crecen. No esperábamos un impacto tan significativo por el tamaño de los alimentos.

Debilitada, casi el 10% de la población de sardinas está por debajo del umbral crítico de supervivencia tras el periodo de cría de finales de invierno, mientras que el plancton sigue siendo escaso. «El tamaño de las sardinas está disminuyendo en todo el Mediterráneo, excepto en el mar de Alborán», revelaron los dos científicos.

europaazul

Entradas recientes

El sector pesquero agradece a Kadis sus promesas de revertir la pérdida de flota y empleo

El sector pesquero europeo, representado por la organización Europêche y de la que forma parte…

8 horas hace

Líderes piden a la UE que actúe sobre el mercado por la sobrepesca de Noruega en materia de cuotas

La Comisión de Pesca del Parlamento Europeo (PECH) ha celebrado una audiencia pública en el…

23 horas hace

Europa planea subastar 45 GW de eólica marina en 2025, mientras que la pesca recurre a Estrasburgo

A pesar de las últimas noticias de incertidumbre entorno a la eólica marina, la realidad…

24 horas hace

Andalucía presionará desde el Comité de Regiones para defender la pesca del Mediterráneo

El jefe del Ejecutivo andaluz, Juanma Moreno será también presidente del Comité de las Regiones…

24 horas hace

La Comisión Europea lanza una consulta pública para evaluar la eficacia de la PPC

La Comisión Europea ha lanzado una consulta pública para recabar opiniones y evaluar la eficacia…

1 día hace

Wärtsilä llevará el mantenimiento de Balearia

El grupo tecnológico ha firmado un acuerdo de ciclo de vida de diez años con…

1 día hace