La Comisión Europea urge a Irlanda para que realice una investigación interna y verifique si se están cumpliendo las normas de la Política Pesquera Común (PPC). En concreto, Bruselas da tres meses a las autoridades del país tras haber detectado fallos en una auditoría realizada el año pasado en el puerto y de Killybegs, situado al norte y uno de los que emplea la flota gallega de A Coruña, Vigo o Celeiro que faena en el caladero de Gran Sol.
Según publica The Times, esta investigación debe «evaluar» la «capacidad de Irlanda para aplicar las normas». El medio recoge que la CE urge la medida tras «las debilidades severas y significativas detectadas en el sistema de control irlandés durante una auditoría realizada por la Comisión en Irlanda en 2018».
Entre aquellos fallos hallados están los relacionados con el pesaje de las capturas o con el registro erróneo de las capturas. Junto a ello, The Times también señala que el sistema de sanción es «inadecuado e ineficaz».