La Comisión aplica el criterio MSY del ICES en 11 de 15 poblaciones y fija recortes plurianuales (2026-2028) para las especies más frágiles del Cantábrico y el golfo de Vizcaya, con el objetivo de evitar cierres anticipados de las pesquerías mixtas.

La Comisión Europea ha afinado su propuesta anual de posibilidades de pesca y ha puesto ya sobre la mesa los 15 Totales Admisibles de Capturas (TAC) que puede fijar sin negociar con terceros países para 2026 en aguas de la UE del Atlántico y el Skagerrak-Kattegat. La novedad de este año es que 6 de esos 15 TAC serán plurianuales —se extenderán a 2027 e incluso a 2028—, lo que da más visibilidad a las flotas, pero también “amarra” durante más tiempo los recortes en las especies que están bajo presión.

Bruselas subraya que se ha guiado por el consejo científico del ICES: en 11 de los 15 stocks había recomendación con rendimiento máximo sostenible (MSY) y la Comisión “la sigue en la mayoría de los casos”. En los otros cuatro, donde el ICES solo podía aplicar enfoque de precaución, la Comisión también lo asume. Solo hay “excepciones limitadas” en las pesquerías mixtas —las del Cantábrico y Vizcaya— para no obligar a cerrar toda la actividad por culpa de una sola especie.

Aguas ibéricas: estabilidad en la especie clave

Para las aguas ibéricas (Cantábrico Noroeste y Atlántico de la Península), los ajustes quedan así:

• Merluza del sur (hake): Se mantiene el mismo TAC que el año anterior, siguiendo el MSY. Es el dato más relevante para la flota española y portuguesa
• Gallo : +12 %. El ICES avala la subida y la Comisión la traslada íntegra.
• Jurel : –5 %. Bruselas aplica el MSY y hace un ajuste prudente por la evolución del stock.
• Rape : –2 % en aguas ibéricas, también por MSY.

Es una combinación que, en conjunto, permite a la flota del norte mantener la especie principal (merluza), mejorar el gallo, pero asumir un pequeño recorte en jurel, muy sensible para las campañas de invierno.

Cantábrico y golfo de Vizcaya: tijera donde más duele

Donde la propuesta es más dura es en el golfo de Vizcaya y, por extensión, en las pesquerías mixtas del Cantábrico:

• Lenguado (Bay of Biscay): –1 % (MSY). Ajuste técnico.
• Merlán / whiting (Bay of Biscay): –27 % para 2026 y 2027. Es un recorte bianual.
• Abadejo / pollack como captura accesoria: –26 % en golfo de Vizcaya, mar Cantábrico y aguas ibéricas, también para 2026 y 2027.

La Comisión lo explica sin rodeos: “para garantizar la viabilidad económica de la pesca sin comprometer la protección del medio ambiente” baja el TAC de abadejo accesorio, porque si no se hiciera las flotas de arrastre, rasco y palangre de fondo se quedarían sin cupo de abadejo a mitad de año y tendrían que parar toda la pesquería mixta. La reducción se basa en un análisis conjunto de datos biológicos y socioeconómicos del STECF y en los niveles reales de capturas recientes.

Además, la CE propone un TAC de solla / plaice en el golfo de Vizcaya y aguas ibéricas con –20 % para 2026, 2027 y 2028, ya con enfoque de precaución, y una bajada del 28 % para la platija / sole en aguas ibéricas (2026-2027). Son las partidas más largas y las que más van a doler a las flotas artesanales.

Raya mosaico y especies sin problemas: “rollover”

Para la raya mosaico (undulate ray) en golfo de Vizcaya y en aguas ibéricas, la Comisión propone mantener el TAC vigente en 2026 (rollover) bajo enfoque de precaución, es decir, sin señales de deterioro.

Bass: cuota nacional, pero más estricta

En el robalo / seabass del golfo de Vizcaya, Bruselas mantiene el sistema actual de delegar en los Estados miembros la fijación de la cuota, pero baja el listón común: el límite conjunto que se pueden repartir Francia y España se alineará con el valor más bajo del rango MSY, para proteger al abadejo, que suele entrar como captura accesoria cuando se pesca bass. Es una forma de decir: “podéis seguir gestionando, pero dentro del carril científico”.

Anguila: se mantiene el cierre de 6 meses

Al seguir crítica la situación de la anguila europea, la Comisión repite el paquete de protección: veda de 6 meses para todas las pesquerías dirigidas (marinas y de transición) y prohibición de la pesca recreativa en las aguas marinas y salobres del Atlántico noreste. No hay relajación porque tampoco la hay en los datos.

Qué pasa ahora

El texto pasa al Consejo de Ministros de Pesca (AGRIFISH) del 11 y 12 de diciembre, donde los países podrán pedir flexibilidad, intercambios o cláusulas de revisión. Pero la señal política es clara: lo que viene con MSY es difícil de mover; lo que viene con precaución se podría matizar, pero siempre que no se ponga en riesgo el stock. La regulación debe entrar en vigor el 1 de enero de 2026.

Lectura española

Para España, el paquete deja una foto nítida:

1. Buena noticia: merluza ibérica se mantiene y gallo sube.
2. Noticia regular: jurel –5 % y rape –2 %.
3. Mala noticia: abadejo –26 % como accesorio en Cantábrico, Vizcaya e Ibéricas y merlán –27 % en Vizcaya durante dos años; obligará a planificar muy fino las mareas y a hacer más uso de intercambios con Francia y Portugal.
4. Marco estable: varios TAC ya vienen con fecha 2027/2028, lo que da seguridad… pero también “congela” los recortes.

En palabras de la propia Comisión, se trata de “asegurar la viabilidad económica sin comprometer el medio ambiente”. En la práctica, para las cofradías del norte significa pescar más ordenado, con más control de las especies acompañantes y con menos margen de error.