Europa Azul

La apertura de los caladeros de sardina ibérica a nivel estatal viene acompañada de polémica.S i bien las personas del sector pesquero español, y en especial las del cerco, han luchado desde meses atrás por su inconformidad con las pautas y condiciones estipuladas por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente para la pesca de la sardina ibérica, poco han conseguido ya que no han logrado ni adelantar el inicio de las capturas, ni la modificación del tope máximo de pesca.

Sin duda nos encontramos con uno de esos temas que confirman la regla de que nunca llueve a gusto de todos. Hablamos de un cupo que se ha reducido en un 26% desde el año pasado (10.799 toneladas de este año frente a las 14.600 de cupo impuestos para la temporada pasada). Esta acusada reducción responde al estado actual de los caladeros, mermados y maltratados por la sobrepesca y las malas prácticas, entre otros factores. No obstante, asociaciones de pescadores y otras instituciones del sector han puesto en jaque al gobierno puesto que el cupo impuesto no sería suficiente para la rentabilidad de la pesca de esta especie en la mayoría de los casos.

Según palabras de Juan Marín Rojano, CEO y fundador de El Rincón de Huelva: «Las condiciones impuestas para la pesca de la sardina en aguas españolas para esta temporada son demasiado restrictivas para el sector de la pesca, pero muy buenas para la conservación de la especie y el buen estado de los caladeros. Limitar el cupo a menos de 11.000 toneladas es malo para pescadores y casi una tragedia para los que utilizan el arte del cerco, económicamente hablando. Por otro lado las malas técnicas de pesca, capturas furtivas para ventas en el mercado negro e incluso la contaminación del agua han perjudicado gravemente el estado de los caladeros por lo que, en este sentido, las limitaciones impuestas pueden ser muy beneficiosas. Es un tema muy polémico y que da mucho que hablar».

La sardina es y ha sido siempre una de las especies más consumidas en nuestro país. Abra que ver cómo influyen las presentes condiciones a su consumo y a su precio en el mercado durante la temporada de este año.

En otro sentido cabe destacar la entrada de la veda de la coquina también a primero de mayo y que se prolongará hasta el 31 de junio. Otro tema que ya está causando indignación en el sector.